“Los 15″ es una de las más complejas y desconcertantes novelas a la que hemos tenido acceso. Es también una de las que más desafíos presenta a la crítica y la interpretación.
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Luis Vigo Cabrera, el autor, es más conocido como compositor y director de música folclórica. Anteriormente integró el Grupo “Todos Juntos” y ahora dirige el Grupo “Kora”. También un buen tiempo dirigió el Grupo de Música Folklórica de la UPAO.
EL TEMA
Se trata de una novela que sale de los parámetros tradicionales y convencionales, para desarrollar temas ambientados no solo en la realidad física o natural, sino también en los complejos planos de la otra realidad, simultánea o paralela al mundo convencional que todos o la mayoría de gentes experimentamos.
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LOS COMIENZOS
El autor nos presenta una nueva descripción, explicación e interpretación del proceso de Cajamarca ante la llegada de los españoles y la importancia de los Baños del Inca; nos habla de los orígenes del poblamiento de Cajamarca, cuya plaza principal, en realidad, no era cuadrada, sino triangular. De manera específica, se centra el contenido en la celebración de la fiesta patronal de Kúnoc o Baños del Inca.
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LA DIMENSIÓN ESOTÉRICA
Esta proyección de ejes o planos donde ocurren los hechos principales se explica bajo la influencia del pensamiento esotérico, que explica los cambios de espacio y de tiempo, diferentes a los convencionales, que todos o la mayoría experimentamos.
De esta manera, la atención del narrador va ganando espacios fuera de los convencionales, especialmente en el relato de los viajes interplanetarios, explicables por la acción e influencia de la poderosa y misteriosa ouija, al mismo tiempo que se va perfilando en los diferentes espacios y tiempos el número 15, el elemento clave y nuclear de la novela.
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LA SEGUNDA PARTE
A partir del capítulo IX, de los catorce que comprende la novela, el relato da un giro sorprendente, conforme al cual el acontecimiento principal refiere cómo el humilde y pobre Andico Gallardo establece un pacto con el diablo, quien le prolongará la vida, a cambio de dinero, amor y poder, pero para cuyo cumplimiento necesita dos adeptos o cómplices, también deseosos de acceder a mejores condiciones de vida: José Diego y el gangoso de la Peña. El compromiso o pacto consiste en el asesinato de 15 personas, para cuya designación emplearán una tabla numerológica, cuyo número clave e imprescindibles es el 9, el único número realmente existente. Dicha tabla se hará con números que sumados entre sí de manera horizontal, siempre darán como resultado el número 15; por ejemplo: 1 + 14 = 15; 2 + 13 = 15; 5 + 10 = 15, etc.
A partir de la firma del pacto con el diablo, Andico (Andrés Gallardo) debe buscar a sus víctimas hasta completar las 15. Como parte principal del pacto, por cada víctima Andico tendrá 5 años adicionales de vida; además, si el crimen comprende a otra persona no considerada previamente, solo se le sumará 3 años.
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EL PROCESO JUDICIAL
Descubiertos los crímenes, la policía detiene al principal sospechoso: Fernando Rafael Vega Roncal, al que se le podría identificar como el otro yo del narrador, natural de Kúnoc. Ante la seria acusación es tomado prisionero hasta que se inicia el proceso judicial, conducido por el correcto juez Zubiate.
Todas las pruebas sindican a Vega Roncal como el autor criminal; pero él explica que cuando se produjeron los asesinatos no estaba en el pueblo, puesto que había viajado al futuro en un platillo volador. Por supuesto, la gente piensa que el acusado está loco y que no habla la verdad, pero al ser examinado por el médico Arnaldo Betancourt Marini, Jefe de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, quien llega por esos días a Cajamarca, se determina que “Vega Roncal no revela rasgos ni acrecentado nivel de agresividad; no presenta evidencia patológicas ni simulaciones; no intenta aparentar normalidad y no padece alteraciones mentales. En general, su perfil psicológico no concuerda con el de un sicópata, ni es agresor en serie”.
Por otro lado, el caso es desconcertante para todo el público, de manera que los magistrados se ven en problemas para otorgar validez a las declaraciones del acusado; por eso, ante una serie de nuevas sospechas, se ordena la captura inmediata de Vicente de la Peña González.
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EL VERDADERO CULPABLE
Durante el proceso se trastoca violentamente la concepción convencional del tiempo y del espacio. En efecto, en determinada parte del proceso, el acusado Fernando Rafael Vega Roncal dibuja en una cartulina con plumones y una regla una tabla numerológica con la identificación de las víctimas de las personas que iban a ser asesinadas en cumplimiento del plan diabólico, cuya identificación siempre suma el número 15.
En tales circunstancias, como en su exposición el procesado desaparece físicamente por instantes. Concluida esta experiencia, el juez encara a De la Peña que ante su confesión ha cavado su propia tumba.
Reanudado el proceso judicial, Fernando Vega explica que en su ausencia de Kúnoc durante los días de los asesinatos él no se encontraba en el pueblo, porque había viajado al pasado, específicamente a los años 1532, 1944, así como había estado también en los años 2025 y 2045.
Todos los asistentes al proceso escuchan admirados y desconcertados lo que había registrado el juez: que Vicente de la Peña había realizado todas esas muertes; por tanto, el principal acusado, Fernando Vega, es declarado inocente, mientras que el real autor descubierto se vuela los sesos de un pistoletazo.
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CONCLUSIONES
La novela, no es solo una construcción artística o literaria, sino una propuesta para analizar la realidad bajo otros criterios y perspectivas.
Los personajes centrales no son portadores de ideales o símbolos, sino tipos humanos guiados por fuerzas extrañas que transcurren su vida según su propia lógica aún sin conocer ni explorar por la mayoría de personas.