Lucho Quequezana: “Tengo el proyecto de llevar música andina a África”
Lucho Quequezana: “Tengo el proyecto de llevar música andina a África”

El destacado músico peruano  presentará este 8 de diciembre, en el Parque de la Exposición, la tercera edición de Ludofónico, espectáculo donde todos los asistentes aprenderán a tocar instrumentos, reconocerán las notas musicales y vencerán el temor de acercarse a la música clásica. En la siguiente entrevista, el líder de la banda Kuntur nos habla, entre otros asuntos, del show y de su pasión por la música peruana.

¿Qué de diferente trae esta tercera versión de Ludofónico? 

Es más que un concierto, es un show donde la gente va a poder envolverse con la música. No solo van a escuchar a la banda (Kuntur) y la Orquesta Sinfónica Nacional, también podrán subir al escenario y tomar la batuta de una orquesta. La gente va a salir entendiendo cómo funciona una partitura y sabiendo para qué sirve la negra, la corchea. Es mentira que sea difícil; cuando entiendes cómo funciona un tipo de género, vas a entender todos los géneros, porque la música es una sola.

¿Cuál es el sentir de la gente que toca por primera vez un instrumento? 

Con la música clásica hay mucho prejuicio en el mundo, la gente dice: “No es para mí, no la entiendo, es aburrida, no sé cuándo aplaudir, es caro, no me van a dejar entrar (al teatro)”. Todo eso es mentira. Es un fantasma que está rondando. Escuchar por primera vez a una sinfónica es uno de los momentos que más disfrutamos en la vida. En Ludofónico queremos que la gente descubra la música. Este show se ha convertido en un espacio liberado de prejuicios respecto a la música. Hay tres espacios.

¿Cuáles son? 

Uno, la ducha; dos, el karaoke; y tres, cuando manejas en el carro. Ese disfrute lo podrías tener todos los días y Ludofónico es el espacio más grande para que te desprejuicies, arriesgues y entiendas muchas cosas.

¿Cuál es el repertorio que va a sonar el 8 de diciembre? 

Todos son mis temas. No es un concierto normal, hay una canción que compongo en vivo con las notas que me dice la gente, para que entiendan que la música es una estructuración de notas. Yo tiro pelotas al azar, quien la levanta me va diciendo qué notas se le pasa por la cabeza, le pido que venga con un celular al escenario, monto la orquesta y al final la persona sube el video a YouTube y le pone un nombre a la composición.

¿A quiénes eliges del público?

Todos los que van al show participan, todos salen leyendo una partitura. Hago una dinámica sobre las cinco notas que todo ser humano tiene en la cabeza, pero nadie sabe. Alas 4 mil personas les voy a sacar esas cinco notas de su cabeza con un juego de luces. Estas son: Do, Re, Mi, Sol y La o Re, Mi, Fa, Sol y La.

Has transitado por el rock, la cumbia y la salsa, ¿hay algún género musical que no has experimentado? 

¡Un montón! Hace como 10 años empecé un proyecto de sonidos vivos con la Unesco y veo que hay universos paralelos. Me gustaría explorar un poco más de lo que pasa acá, lo hago con (el programa de Plus TV) Prueba de sonido, y afuera hay géneros que me gustaría explorar, como la música de Marruecos, Senegal. Tenía un proyecto de llevar música andina a África, espero se concrete y terminar de hacer este intercambio. Tenemos mucha influencia africana -el festejo, landó-, pero ¿qué llegó a África de nosotros? Absolutamente nada.

¿Por qué los peruanos prefieren consumir música foránea?

La música peruana no es solo la tradicional, es también la cumbia, el rock; los que no consumen se la están perdiendo. Es como si solo comieran ají de gallina y se pierden la pachamanca, la comida del sur, norte, de la selva... El hecho de abrir el espectro, descubrir qué más está sonando en Perú, es tarea de nosotros. No te vas a acercar a otros géneros si tienes 50 mil prejuicios en la cabeza: el rockero no va a escuchar un huayno ni a balas, ni una cumbia; ni el de la cumbia va a escuchar rock ni salsa.

¿Que significa para ti la música? 

Es entregarle todo, una carrera, pasión, profesión. Le tienes que entregar tu vida, tu sacrificio, tu frustración, tu lucha; acercarse a la música es agarrar tu guitarra en tu cama, ser feliz y cantarle a tu novia, a tu mamá, dedicarse a la música es estructurar sonidos para que la gente la escuche digerida. El trabajo con Ludofónico es que la gente pierda el miedo, se acerque y disfrute de la música.

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