Pedro Salinas: "A Francisco le tengo más fe que muchísimos católicos"

Pedro Salinas afirma que ya está cansado del Sodalicio y que quisiera escribir sobre otras cosas. Volver a escribir crónicas, por ejemplo, como señala en el prólogo del tercer tomo de El caso Sodalicio (Planeta, 2018), libro en el que ha recopilado textos sobre el tema publicados en medios impresos y digitales desde el 2017 hasta este año.

Recientemente denunciado por difamación por el arzobispo de Piura, José Eguren Anselmi, quien es señalado como encubridor de pederastas según los testimonios de algunas víctimas de abusos sexuales ocurridos en el Sodalicio, el autor se reafirma en su intención de dar batalla y de “ratificarnos en todo lo que hemos escrito” sobre la institución fundada por Luis Fernando Figari, tal como lo declaró a un medio local.

Hace un tiempo, el papa Francisco reabrió el caso Sodalicio y nombró a un comisario, el obispo Noel Londoño. ¿Qué es lo que él debería hacer? 

Disolver el Sodalicio y retener sus propiedades. Vender una parte para reparar a las víctimas y otra para dejársela al nuevo núcleo, que de repente quiere hacer una cosa nueva, distinta, distanciados de Figari y todos sus fundadores y cofundadores y generación fundacional, que para mí son la simiente de esta organización dizque religiosa, pero que de eso poco o nada tiene.

¿Por qué la Iglesia no quiere que organizaciones como esta se disuelvan? 

Porque esa ha sido la política institucional de los últimos años, un modus operandi que se instauró con Juan Pablo II, que para mí es el santo de los pederastas. Porque él es el mayor Papa encubridor que se conoce en la historia moderna. Ratzinger, lo poco que hizo, lo hizo con mucha debilidad. Y Francisco recién se ha dado cuenta a cabalidad del problema cuando vino a Chile y a Perú. Recién se ha dado cuenta de que lo han estado desinformando.

¿Cree que habrá un giro positivo?

Yo a Francisco, siendo agnóstico, le tengo más fe que muchísimos católicos. Se dio cuenta de que en Chile metió la pata hasta los corvejones no una vez, sino tres, porque insistió en el tema justo cuando salía de Lima hacia Roma, ofendiendo y revictimizando a las víctimas sexuales chilenas. Recién en Roma se ha dado cuenta: “Ups, creo que la ...”. Pero vemos que tiene toda la intención de hacer la diferencia. No solamente quedarse en palabras, sino traducir esas palabras en acciones. Sí estoy viendo a un Papa que no solamente ha tomado conciencia del problema, sino que está enmendando cosas. Y tiene que aplaudirse, reconocerse.

¿Cómo las está enmendando?

Ha convocado para febrero a una asamblea con autoridades vaticanas para debatir el tema de la pederastia clerical a nivel global. Es una cosa inédita, histórica. ¿Qué Papa ha hecho eso? Nadie. ¿Es un gesto? ¿Demagogia? Yo quiero creer que no. Quiero creer que este Papa sí está haciendo las cosas correctamente por primera vez.

Pero el tema permanece aún en lo eclesiástico, sin pasar a un fuero civil. ¿Servirá de algo?

Yo soy agnóstico gracias al Sodalicio. Yo no creo en la justicia divina, que es lo que dice mucha gente. Que no te preocupes porque ya cuando Figari se muera, se va a ir al infierno. A mí me importa poco que se vaya al infierno o al cielo o al purgatorio. Yo quiero que este tipo pague acá. Entonces, mientras yo no vea eso, para mí el caso Sodalicio va a seguir abierto.

Hace un tiempo ampliaron el plazo de la comisión del Congreso que ve el caso Sodalicio, entre otros. ¿Qué se espera de esta comisión?

La propuesta de hacer una comisión nacional investigadora al estilo de la de Australia, que se tomaron cuatro años para investigar, y luego de ello, ver protocolos para evitar el abuso sexual de menores, violaciones a los derechos humanos. El tema de la prescripción también, que es una norma que favorece a pederastas en el Perú. Debería abolirse. No debería existir. Figari, por supuesto, se favorece con la norma actual. Ya con este Figari no puedes hacer nada, pero con el futuro Figari debería abolirse la prescripción para que deje de favorecer a los pederastas. Y finalmente, que esta comisión congresal haga un diagnóstico objetivo y certero, para que este tipo de instituciones como el Sodalicio no se reproduzca en el Perú y dejen de existir. Que no haya más Figaris, que no haya más Germán Doigs, que no haya más pederastas que utilizan organizaciones religiosas de fachada para perpetrar crímenes de todo tipo, instalando culturas de abusos de poder y de carácter fascista y sectario.

Datos

- En 1975, se da el primer caso de abuso sexual en el Sodalicio.

- En el 2000, José Enrique Escardó denuncia por primera vez los abusos en el Sodalicio.

Sobre Pedro Salinas