Las casualidades no existen, piensan muchos, los mismos que aseguran que hay historias que estaban destinadas a cruzarse en el camino para cumplir sueños, curar almas y generar sonrisas en medio del dolor. Silvia Miró Quesada, periodista, y Claudia Bernales, psicooncóloga y especialista en pedagogía hospitalaria, juntaron sus conocimientos para un fin noble y son las autoras de “Bobby y sus amigos del hospi”, libro que está dedicado a niños que estén sufriendo cualquier enfermedad y que necesitan un soporte emocional y educativo.
“Conozco a Claudia porque yo tengo mi página en Facebook “Unos días con Bobby” en la que escriben profesionales de la salud y de diversas disciplinas. Soy muy celosa de la información que se publica y Claudia empezó a colaborar desde el 2019″, dice Silvia. “Ella estaba buscando a una psicóloga especialista en oncología y yo ya tenía casi diez años trabajando en ese tema, Silvia sintió que yo podía escribir para Bobby, y así se dio nuestra amistad”, cuenta Claudia.
Escribir un libro juntas requiere tener una química profesional, además de los mismos objetivos.
Silvia: Estoy en un momento en mi vida en el que me he dado cuenta que tengo un súper olfato para identificar a las personas con las que puedo trabajar y desarrollar proyectos. La empatía y seriedad en el momento de elaborar los contenidos son requisitos indipensables.
Claudia, antes de trabajar en ‘Bobby y sus amigos...”, ya habías escrito “Mis clases en el hospi”..
Sí, era un e-book, y lo creé con dos internas de psicología de mi consultorio, porque ya había hecho la especialización en Pedagogía Hospitalaria, y dije, no hay ningún material que hable sobre la pedagogía hospitalaria en la pandemia y creamos este libro. Silvia lo vio, se lo pasé, le gustó y me dijo: ‘sería bonito juntar a Bobby y a tus personajes de “Mis clases en el hospi”. Me pareció maravillosa esa idea.
¿Silvia y qué fue lo que te motivó esa unión de universos narrativos?
Lo que me motivo fue que Claudia planteó personajes de la migración, uno venía de Ayacucho, otro venía de Venezuela, y ese tema me conmueve, por eso quiero trabajar un tercer libro en el idioma quechua. Como había un personaje de Ayacucho, entonces decidimos poner unos diálogos en quechua, porque una de las cosas que más me duele, y siempre me produce mucha tristeza es imaginarme a las personas que dejan su lugar de origen.
¿Cuál es el propósito principal del libro?
Claudia: El libro tiene tres canales que son importantes: actividades recreativas, de conocimiento general y una parte de soporte emocional en el que se le permite al niño poder expresar su mundo interno. El objetivo principal del libro es ser un soporte para el Ministerio de Educación, y que pueda ser de ayuda justamente para las aulas hospitalarias del ministerio, para poder llegar a esos niños donde no hay ese servicio educativo hospitalario. Si bien nosotros tenemos un marco legal, que es la Ley 30772, todavía no se cumple en totalidad.
El libro no deja de lado la parte lúdica.
Silvia: Una de las misiones que tiene, “Unos días con Bobby” es trabajar en las diferentes actividades promoviendo el juego y la parte lúdica, porque uno suele ver el cáncer de una manera fría, dura, no. Lo que queremos con Claudia es reducir los estigmas, si estás internado o en tratamiento ambulatorio largo, nadie te está quitando esa capacidad de jugar y que los adultos y los médicos lo entiendan también.
¿Como se encuentra la situación de la Pedagogía Hospitalaria en el país?
Claudia. Si bien tenemos un marco legal, es muy incipiente todavía, no se dan abasto. El Minedu se apoya mucho de la asociación civil, y lo que nosotros de una u otra manera también buscamos, es de que se tenga conciencia de que el trabajo educativo en el niño en situación de enfermedad u hospitalización, tiene que ser desde el profesional, no desde la buena fe solamente.
Definitivamente se necesita un profesional especializado.
Claudia: El contexto hospitalario es de alto impacto. La pedagogía hospitalaria lo que tiene de base, el pilar principal es que se trabaja desde la flexibilidad, tienes que considerar la parte física, la parte cognitiva y la parte emocional, sino considero nada de eso, no estoy haciendo un buen trabajo.
Una realidad que las autoridades del sector tienen que tomar en cuenta.
Silvia: La falta de especialización es lo mismo que pasa con los médicos, con los técnicos, no hay especialistas en oncología. Por ejemplo, cuando tú hablas de la Ley Nacional de Cáncer y que cada centro médico en el interior del país, tiene que tener, un equipo, un técnico, un oncólogo, pero no hay. Es bien complicado el tema de la especialización, es realmente un tema que nos limita muchísimo y no nos permite avanzar.