El Mundial de Fútbol Rusia 2018 llegó a su fin y para cerrar esta gran fiesta deportiva se contó con la presencia de distintos personajes durante la ceremonia de clausura previa al partido Francia-Croacia, que definió al nuevo campeón de la Copa del Mundo.
Una de las apariciones más aclamadas en el Estadio Luzhnikí, de Moscú, fue la del exfutbolista, Ronaldinho, quien se robó todas las miradas tocando los timbales junto a los bailarines rusos que desarrollaron una impresionante coreografía.
El astro brasileño, de 38 años, fue el representante de las Leyendas de la FIFA en el evento, que duró menos media hora, pero en el que no faltó el ritmo y en la que participaron cerca de 800 personas.