Algunas personas suponen que para vender una propiedad solo se necesita colocar un letrero o un anuncio y listo. En realidad, la labor es mucho más compleja si realmente se quiere obtener un precio justo, en el menor tiempo posible y con garantías.
Fíjese bien en estos 5 errores típicos de propietarios y evítelos a toda costa:
1. Ir por cuenta propia. No asesorarse de un agente inmobiliario es riesgoso y probablemente demorará mucho más de lo que espera. Aunque le cobrarán una jugosa comisión, los agentes ya tienen una cartera de clientes y podrán cerrar el trato con mayor facilidad.
2. Falsas expectativas. Establecer una cifra muy alta o muy baja puede alejar a los clientes. Al hacer la estimación no debe enfocarse en aspectos sentimentales sino en las ventajas que tiene para las tendencias que hay en el mercado. Tampoco ignore los defectos que pueda tener su vivienda. Pregúntele a un tercero para obtener una opinión más objetiva.
3. No ordenar la casa. La primera impresión nunca se borra de la mente, por lo tanto, antes de recibir visitas debe preocuparse para hacer que su propiedad los deslumbre.
4. Descuidar el márketing. No basta con solo poner un letrero, tiene que hacer anuncios con fotos. De esa forma llegará a más personas. Aproveche los portales web para subir las mejores que pueda.
5. No ser flexible. Es posible que un cliente esté considerando seriamente la oferta pero hay aspectos que le preocupan. Si encontró que el piso no era lo que esperaba, puede ofrecerle mejorarlo o dejar el sistema de tuberías como nuevo. Son servicios adicionales que el cliente no esperaba y pueden hacerle cambiar de opinión.