Javier Bereche Álvarez, presidente del Directorio de Caja Municipal de Piura. Difusión
Javier Bereche Álvarez, presidente del Directorio de Caja Municipal de Piura. Difusión

En el marco de una estrategia de fortalecimiento institucional y crecimiento sostenible, Caja Piura inició conversaciones formales con BID Invest, brazo de inversión privada del Grupo Banco Interamericano de Desarrollo (BID), para concretar una alianza estratégica que impulse su solidez financiera, así como la adopción de nuevas tecnologías y el acceso a capital en condiciones preferenciales.

Tales conversaciones se dieron en la sede del BID, en Washington D.C. y marca un hito en la historia de la microfinanciera.

La delegación de la microfinanciera estuvo liderada por su presidente del Directorio, Javier Bereche Álvarez, y el director José Olivares, quienes presentaron ante los ejecutivos de BID Invest el modelo de negocio, desempeño financiero e impacto social de Caja Piura en Perú.

impacto nacional

Bereche refirió que en un entorno económico global desafiante, establecer vínculos con un socio multilateral de primer nivel permitirá a Caja Piura potenciar su estructura financiera.

“Este acercamiento con BID Invest es una señal clara del interés mutuo por explorar un modelo de asociación que va más allá del financiamiento. Hablamos de transferencia de conocimiento, mejores prácticas internacionales y productos digitales innovadores orientados al desarrollo de los emprendedores peruanos”, señaló.

La propuesta de valor de la Caja Municipal de Piura se respalda en una cartera de colocaciones que supera los S/ 6,121 millones, una base de más de 431,971 clientes en los 24 departamentos del país, y un sólido compromiso con la inclusión financiera: el 50.1% de sus clientes son mujeres.

Caja Piura hizo tal acercamiento con el BID Invest como parte de una hoja de ruta más amplia que recientemente llevó a Parí, donde sus directivos sostuvieron reuniones similares con la Agencia Francesa de Desarrollo (AFD).

Tras esos primeros acercamientos, el proceso continuará con una fase de debida diligencia, que incluirá el envío de información financiera, comercial y de riesgos; así como la calificación técnica por parte del organismo multilateral.