El perfil del usuario que está viajando –principalmente al norte del Perú y al Cusco– ahora mismo es más joven.
El perfil del usuario que está viajando –principalmente al norte del Perú y al Cusco– ahora mismo es más joven.

Las empresas de turismo en Perú y en todo el mundo siguen en la brega por salir de una de las peores crisis para la industria. ¿Cómo aporta la digitalización para la reactivación de este sector? Especialistas explican cómo las herramientas tecnológicas juegan a favor de esta actividad.

Turismoi es una startup peruana que funciona como una plataforma digital de venta y distribución de tours y actividades en Latinoamérica. Diego Arbulú, CEO de la empresa indicó que trabajan en el desarrollo de tecnología a favor de las pymes y mypes de sector turismo.

“El enfoque es conectar los servicios, tours y actividades en la región a través de los canales de ventas, agencias de viaje online, hoteles aerolíneas, beneficios corporativos, distintos canales de venta para que estas pymes puedan vender”, comentó. Y añadió que trabajan en 14 países con más de 2 mil pymes, a nivel local, regional y global.

Arbulú explicó que si bien el turismo es una industria que se ha recuperado de las crisis más duras de la historia, nunca han vivido un momento como este llegando a niveles cero de venta. En ese sentido, vienen trabajando para que las pymes, que son el sector más golpeado, entren en un proceso de transformación digital para acelerar la recuperación y poder llevar sus servicios a diferentes canales de venta

Añadió que existen distintas herramientas en el mercado con este fin y son accesibles. “Creo que es el momento adecuado, para generar espacio, compartir conocimientos y buenas prácticas para apoyarnos ente los distintos agentes del sector”, apuntó.

El CEO reconoció que en estos meses, ante la premura de la digitalización, se ha visto poca capacitación. En esa línea es importante seguir la tendencia que exige un momento como este ya que el usuario ha cambiado su manera de acceder de manera distinta a la información, a los servicios y a la compra online.

Por su parte, Giorgio Benza, CCO B2C y CMO de Expertia Travel, consorcio formado por Nuevo Mundo y Condor Travel, dijo que aprovecharon la situación para desarrollar proyectos que tenían un horizonte más lejano. “Por ejemplo, queríamos lanzar un asistente virtual, vía Zoom o Teams donde el cliente puede contratar a una asesora de viaje, desde su casa. Lo lanzamos durante la pandemia y nos funcionó muy bien. Ese canal de venta va a seguir”.

Parte de la estrategia también fue mantener el contacto con el turismo, incluso cuando no había viajes. Con Nuevo Mundo Viajes se centraron en el turista interno mostrando destinos como Ucayali, Amazonas, Loreto y ciertas partes de Piura, donde hay poca densidad e índices bajos de contagios.

Mientras que en Condor Travel, que es una agencia receptiva, crearon campañas para los turistas extranjeros a través de eventos online, webinars y tours virtuales. “Lo que no queríamos era distanciarnos. Lo hemos visto como una oportunidad para estar más cerca y a la vez de mejorar nuestros procesos”.

¿Mejora el turismo?

Benza comentó que poco a poco se ve una mejora en las ventas turísticas, ya que hay mucha gente que empezó a viajar dentro del Perú. También hay personas que están comprando ahora para viajar después, en abril o julio del próximo año.

Manifestó que la dinámica de consumo de mercado ha cambiado por tres variables: la desconfianza por el COVID-19, la austeridad porque la gente tiene menos dinero, y la incertidumbre. “Hemos trabajado en estos tres frentes”, precisó. Trabajando los protocolos, con precios competitivos y flexibilizando la cancelación de viajes sin penalización.

Con respecto al perfil del usuario, Benza cree que el público que está viajando –principalmente al norte del Perú y al Cusco– ahora mismo es más joven, con una actitud diferente con el riesgo. También ha aumentado el turismo rural, se busca visitar zonas menos densas fuera de la ciudad con bajas aglomeraciones de gente.

Asimismo se busca más el ecoturismo, con un turista que respeta más los sitios donde va y el medioambiente. “Viajes de bienestar, yoga, meditación, también de deportes al aité libre, con bicicleta de montaña o caminatas. Es un formato que ya estaba en el mercado, pero se ha ido reforzando durante esta etapa”, finalizó.