Puma, la compañía alemana de moda deportiva, cerró el primer semestre del 2020 con una caída de 16,3% en sus ventas, lastrada por las medidas implementadas para contener el avance de la pandemia del coronavirus.

Solo en el segundo trimestre, la compañía redujo su facturación un 32,3%, hasta US$590 millones; mientras que en el mismo periodo de 2019, logró facturar US$1.431 millones y crecer 15,7%.

“Este ha sido el período más difícil que yo haya vivido”, reconoció Björn Gulden, consejero delegado de Puma. Un virus que ha cerrado el 85% de todo el negocio de retail de deporte y moda es una experiencia que nunca me había imaginado”, enfatizó.

El ejecutivo explica que la estrategia a corto plazo fue ser flexible con los socios wholesale, reforzar su financiación con líneas de crédito, incrementar las actividades promocionales en sus tiendas propias y focalizarse en el comercio electrónico.

Todas las categorías de producto redujeron sus ventas a doble dígito entre abril y junio: el calzado cayó un 36%; la ropa, un 33,6% y los accesorios, un 18,6%.

PÉRDIDAS

El margen bruto se redujo en 540 puntos básicos, hasta el 43,9%, debido al aumento de los descuentos, la devaluación del inventario y las provisiones por devoluciones, así como el impacto negativo de los tipos de cambio. Las pérdidas del grupo ascendieron a US$70 millones, frente a los US$169 millones que ganó en el segundo trimestre de 2019, informa el portal español Modaes.

Pese a la adversa coyuntura, Puma señala que la trayectoria actual apunta a una recuperación completa antes de final de año; aunque el riesgo de una segunda ola con grandes confinamientos continúa latente, señala la empresa.

“Este es y será un año difícil. El objetivo de la marca es sobrevivir, recuperarse y después emerger más fuerte y creciendo”, afirman.

TENDENCIA AL DEPORTE

Puma confía en que el negocio de los ‘productos deportivos’ estará en una posición fuerte tras esta crisis.

La empresa argumenta que la gente ha empezado a hacer más deporte, incluso en circunstancias difíciles y que se espera que la casualización de las tendencias y la influencia de las marcas de moda deportiva se refuerce.

En este sentido, la compañía prevé recuperar la senda del crecimiento en 2021 e invertir en nuevas categorías de producto.