Desde setiembre del año pasado, el Ministerio de Energía y Minas (MEM) anunció que revisaría normas en el sector eléctrico, a fin de que las bajas tarifas de los industriales también se vean en los recibos de los usuarios residenciales. Sin embargo, hasta la fecha solo se sabe de una medida que ha desatado un cortocircuito entre las empresas: la suspensión de una declaración en el costo de la generación térmica.
EL MERCADO ELÉCTRICO
La electricidad proviene de un “mix” entre todos los tipos de energía, principalmente de centrales hidroeléctricas y generadoras térmicas (que han estado declarando costos bajísimos para maximizar sus ingresos). A este mercado “mayorista” de generación eléctrica recurren las distribuidoras, que proveen a los usuarios residenciales y que, de acuerdo con información de Enel, también obtuvieron precios bajos en el 2015.“Dos de ellas (distribuidoras) consiguieron contratos de largo plazo con una reducción de 40% en el precio. Esta situación no se repetirá si se interviene para incrementar artificialmente el precio spot, ya que la siguiente compra de energía de las distribuidoras sería a precios mayores”, señalaron. La compañía también reconoció que esta intervención en el mercado spot (suspensión de la declaración citada) reduce en S/0.40 el recibo de un hogar con un consumo mensual de S/50. No obstante, añadió que en el largo plazo las distribuidoras deberán pagar más por la energía, lo que redundaría en alzas para el usuario final.
“En el caso de los hogares, esta alza podría superar el 10%; es decir, en un hogar que pague S/50 el alza podría ser de S/5 mensuales”, indicó Tatiana Lozada, gerente de Regulación y Relaciones Institucionales de Enel Perú.