Según el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), en 2024, el sector Educativo tuvo un presupuesto de S/50,048 millones, de los cuales S/31,098 millones se destinó para pago al personal y obligaciones sociales, pero persisten las deficiencias en la calidad educativa, señala Comex Perú.
El monto destinado al pago de personal y obligaciones sociales en el sector educación es casi igual el presupuesto total para Salud (S/32,451 millones) y supera a los demás sectores, incluyendo transporte y seguridad pública.
“Si bien se requieren docentes, preocupa que en el 2024 apenas el 23.3% del presupuesto en educación se destinó a proyectos de inversión en infraestructura y equipamiento”, sostiene el gremio exportador en su semanario 1263.
La participación de las remuneraciones y obligaciones sociales tuvo una tendencia al alza en los últimos años, según el Ministerio de Educación (Minedu).
“Recién a partir de 2021, la asignación a infraestructura y equipamiento empezó a recuperarse. Sin embargo, la adquisición de bienes, servicios y mantenimiento (que se refiere a la inversión en materiales didácticos, libros, equipos informáticos, mobiliario y otros recursos necesarios, así como los gastos recurrentes para la conservación y reparación de edificios, equipos e instalaciones) continúa disminuyendo año tras año, con apenas el 9.5% en 2024”, señala.
RENDIMIENTO. Comex Perú indica que pese al aumento de los recursos no han mejorado los aprendizajes de manera sostenida.
“En la prueba PISA 2022, el Perú tan solo promedió 391 puntos en matemáticas (caída desde 400 en 2018) y se ubicó en el puesto 59 de 81 países evaluados, lejos del nivel mínimo aceptable, y de vecinos regionales como Uruguay o Chile. El promedio registrado implica que el 66% de los estudiantes a nivel nacional rindió por debajo las competencias mínimas requeridas”, anota.
Paralelamente, prosigue, las evaluaciones nacionales reflejan deficiencias docentes: en 2024, siete de cada diez maestros no alcanzaron el nivel pedagógico mínimo requerido, al reprobar la prueba nacional para el ingreso a la Carrera Pública Magisterial, según el Minedu.
Agrega que esos problemas se relacionan con las políticas de contratación y evaluación docente.
“La Ley de Reforma Magisterial (LRM) de 2012 instauró concursos públicos para el ingreso y promoción basados en mérito. Sin embargo, en años recientes se han relajado los estándares”, precisa.