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Por aire, mar o tierra, Nicolás Schreier tiene clarísimo que la aventura es su mejor elemento. Le gusta estar en movimiento y ver paisajes distintos. Esa pasión por el deporte lo ha convertido en tetracampeón mundial, cuatro veces campeón nacional y tres veces campeón sudamericano. Sin embargo, el windsurfista y patrocinado por Herbalife, todavía tiene varias metas que desea conseguir y aunque el viento le sople en contra, irá tras ellas.

¿Cómo llegaste al windsurf? Por un tiempo viví en Guatemala y jugaba tenis pero cuando regresé al Perú, en un verano, vi el windsurf pasando a toda velocidad y me dije que quería aprenderlo de todas maneras. Me encantó ese contacto del deporte y la naturaleza. Disfrutar del viento y del mar, me hizo decidir que esto era lo mío.

Es un deporte con varias modalidades, ¿en cuáles compites? El windsurf es como la bicicleta o el automovilismo, hay variedades. En mi caso, donde he logrado más títulos es en Fórmula Experience, que se hace con una tabla específica y una vela específica. Ahora la modalidad de Slalom está mucho más competitiva a nivel mundial y por eso, me mudé a esa modalidad.

Hasta ahora, ¿qué competencia te ha parecido la más difícil? La más adrenalínica fue en el 2010, en Brasil. Hasta el penúltimo día estuve en segundo puesto y el último día, el viento se puso a mi favor y se dieron las condiciones perfectas para que pudiera ganar. Ese último día recuperé todos mis puestos y quedé primero. Todo era estrés hasta el último día y en la última regata sentir que había logrado el título fue alucinante.

¿Qué es lo principal en este deporte? El equipo es fundamental. Invertir en tener buenas tablas, velas y quillas es muy importante para tener un buen desempeño a la hora de navegar. Tienes que meterte al agua muchas veces y probar todas las velas hasta que encuentres la combinación perfecta para que puedas ir lo más rápido posible.

¿Qué pasa por tu mente cuando estás a punto de competir? Mi papá es quien mejor sabe que no me puede hablar porque entro en un estado mental de concentración en el que no le presto atención a nadie. Repaso mentalmente los circuitos o la estrategia.

¿Te ha tocado competir con el viento en contra? El viento es algo superlativo porque puede estar a favor o en contra tuyo. Tienes que tener distintos planes, mirar las condiciones todo el tiempo y tomar las mejores decisiones. Lo ideal es ser un deportista que pueda competir en todo tipo de condiciones sacando un resultado positivo.

Ya eres tetracampeón, ¿hay algo que te falta conseguir? En realidad, los títulos son consecuencia de esta pasión que tengo por el deporte. Disfruto meterme al agua y creo que los títulos seguirán veniendo, dependiendo de que siga con esa pasión. Sí me gustaría tener un título en la modalidad de Slalom que es una modalidad más competitiva que la fórmula en general.