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A pocos días de celebrar un nuevo aniversario de la Ciudad Blanca, las calles amanecieron sucias y repletas de por la huelga del Sindicato de Obreros Municipales de (SOMA).

Los trabajadores de limpieza suspendieron ayer su labor por acuerdo del SOMA, que exige la desactivación de la Empresa Municipal S.A. (Emecsa) por poner en riesgo la estabilidad laboral de sus trabajadores al asumir la administración de varios recintos ediles.

Durante las primeras horas de la mañana, luego de ver las calles céntricas de la ciudad con basura, el gerente municipal de Arequipa, Ricardo Chávez no pudo entablar diálogo con los dirigentes del sindicato.

El secretario del SOMA, Temístocles Pola, precisó que en varias ocasiones se reunió con Chávez sin que las demandas del sindicato sean resueltas. Exigieron la presencia del alcalde Alfredo Zegarra.

Sin embargo, el burgomaestres, visiblemente molesto y acompañado de algunos funcionarios, salió a la calle a barrer la basura acumulada al rededor del mercado San Camilo.

“Ellos (dirigentes del SOMA) no han conversado con nosotros. De la noche a la mañana han secuestrado a las unidades de limpieza”, expresó .

Agregó que su administración está preparada para limpiar la ciudad, y que no permitirá que un “grupo de personas con intereses políticos o de grupo boicot en la ciudad”.

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