Son 400 alumnos del colegio Carlos M. Febres, ubicado en el distrito de Mollendo, de la provincia de Islay, que vienen siendo afectados desde el año pasado, ya que tienen que estudiar de turno mañana y tarde, por falta de aulas prefabricadas.
Sucede que, en diciembre del año pasado, la obra de ampliación del colegio primario fue paralizada. La empresa que contrató el Gobierno Regional de Arequipa para ejecutar el proyecto no contaba con solvencia económica y se tuvo que resolver el contrato.
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La directora del colegio, Valentina Monroy, explicó que para que los niños continúen estudiando ellos solicitaron aulas prefabricadas tanto al municipio provincial como gobierno regional. Ambas entidad se comprometieron a dotar los módulos.
Pidieron a los padres de familia a construir una superficie de cemento para colocar los módulos. Si bien los padres cumplieron, solo el municipio de Islay entregó 4 módulos, pero el gobierno regional, a la fecha, no entrega otros 3.
Esto hizo que, para que los 400 menores puedan estudiar, se creen dos turnos y reduzcan las horas de estudios. Los padres de familia se presentaron hoy en los exteriores del hospital Alto Inclán, donde estaría el gobernador de Arequipa, para exigir una solución.
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