Reinicio de trabajos en Majes Siguas II sin fecha. (Foto: GEC)
Reinicio de trabajos en Majes Siguas II sin fecha. (Foto: GEC)

Los representantes de la Concesionaria Angostura Siguas (Cobra) no se presentaron ayer a la sede del Gobierno Regional de Arequipa (GRA) para la firma del acta para tomar el control del proyecto agroindustrial Majes Siguas II.

El gerente de la Autoridad Autónoma de Majes (Autodema), Ulises Aguilar Villavicencio, informó que media hora antes de la reunión recibieron una comunicación de la concesionaria que informó que no asistirían y daban por no aceptado el control del proyecto.

Es evidente quién está en falta. El Gobierno Regional de Arequipa hizo los modos posibles para cumplir con la entrega del proyecto, lo hemos logrado. Si la concesionaria no vino a la firma del acta del control del proyecto, va a traer situaciones formales y legales que va a desencadenar en eventos posteriores”, anunció el funcionario.

Gerente de Autodema  y funcionarios esperaron a Cobra, pero nunca llegó. (Foto: GEC)
Gerente de Autodema y funcionarios esperaron a Cobra, pero nunca llegó. (Foto: GEC)
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Según la adenda 13, firmada en julio de 2022, Autodema debía entregar hasta el 12 de abril los terrenos desocupados, ubicados en los sectores de Pusa Pusa, Pampa de Siguas y Valle de Siguas, para la ejecución de las obras de infraestructura hidráulica restantes de la primera fase y obras nuevas de la segunda fase del proyecto.

Según Aguilar Villavicencio,  existe poca voluntad por parte de la concesionaria de continuar con el proyecto Majes Siguas II. Anunció que  Autodema y el GRA plantearán en los próximos días una controversia y de no llegar a un acuerdo se optará por el arbitraje que durará al menos seis meses.

El asesor legal de Gobernación, Alfredo Paredes, informó ayer que ante la inasistencia de Cobra para la firma del acta de entrega del control de proyecto,  no hay más plazo adicional. El requisito para formalizar la entrega de terrenos no se cumplió.

Paredes explicó que le corresponde ahora a Autodema y al GRA plantear una controversia. En este proceso, la primera parte consiste en realizar un trato directo, en el cual se deberá dialogar con la concesionaria.

De no llegar a un acuerdo se optará por la segunda fase que llevará la controversia a la Cámara de Comercio de Lima (CCL). Sin embargo, se necesitará un tiempo prolongado de 4 a 6 meses para resolver las diferencias.

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(Cobra) está trabando el proyecto, se hizo un esfuerzo para firmar la adenda 13, ni así la concesionaria manifiesta la voluntad de continuar el proyecto. El Estado peruano tiene que defenderse. En un arbitraje, un tercero decidirá si se cumplió con entregar el control del proyecto, como señala el Gobierno Regional o como afirma la concesionaria que no se entregó. Estamos casi seguros que el fallo saldría a favor nuestro”, señaló.

El asesor informó que la concesionaria no presentó los estados financieros del 2018, 2019, 2020, 2021 y del 2022, vence el plazo los primeros días de mayo. Por lo que se desconoce si es verdad los gastos que ha manifestado durante todo este tiempo.

Cuestionó a la empresa de buscar una serie de hechos, desde el planteamiento de la adenda 13 en el 2017, que se paralizó el proyecto.

Contractualmente, se firmó el proyecto en el 2010, por la demanda del Gobierno Regional de Cusco por el agua del río Apurimac demoró hasta afines del 2013 y después la concesionaria solicitó actualización de los costos que llevó un año y en el 2015 se firma el texto único ordenado y el 1 de mayo se inician los trabajos. Después hubo postergaciones en el 2016, donde se paralizaron algunas obligaciones y desde el 2018 se paralizó completamente”, recordó.