La denuncia de maltrato presentada por un soldado del cuartel Salaverry, del Ejército Peruano, vuelve a poner sobre el tapete los presuntos abusos al interior de recintos militares. El cabo del Ejército José Daniel E. A., de 18 años, acabó en el Hospital Militar para ser atendido por un profundo corte en el rostro, luego de recibir una golpiza en el fuerte y sin motivo aparente.
Según narró en la comisaría de Miraflores, la primera agresión ocurrió a las 7 de la mañana del último domingo. El Cabo del Ejército dijo a la Policía que solicitó al subteniente EP, Darío Hurtado Tello, hacer uso de su pase para poder salir del cuartel, pero la respuesta que obtuvo fue un golpe en el estómago de parte su superior, negándole la salida.
AGRESIÓN
Posteriormente, José Daniel se dirigió a descansar a su litera, donde fue golpeado por un soldado de apellido Chipana Italaque.
En su relato, el agraviado indicó que a las 3 de la tarde, su compañero de promoción, Aderlyn Huaman Huayllas, lo llamó por celular para decirle que se encontraban en el polvorín, pidiéndole que le llevara su gaseosa que tenía en el dormitorio.
Cuando se encontraron, el denunciante pidió a su compañero que le invite un poco de la gaseosa y al probarla, se percató que tenía alcohol.
Esto provocó una discusión entre los soldados y luego se transformó en una agresión contra el denunciante, quien aseguró que su compañero lo golpeó con algún objeto en la nariz y en la frente. Fue tan fuerte que perdió el conocimiento.
Después de las seis de la tarde, el golpeado despertó en el hospital, donde estuvo acompañado de otro soldado.
El denunciante recalcó que no es la primera vez que sufre agresiones al interior del cuartel de Salaverry, precisó que desde julio del año pasado es golpeado y acuso directamente a los suboficiales de apellidos Hurtado y Choque como los autores de las agresiones físicas.
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