Arequipa: un viaje en el tiempo en el museo del BCR

Un Characato de plata, billetes acuñados por el Banco de Arequipa, esculturas santas con dientes de leche, pinturas de la Escuela Cusqueña y las monedas de la Serie Riqueza y Orgullo del Perú, son parte de la muestra permanente que el Banco Central de Reserva (BCR) abrió en la refaccionada Casa Goyeneche, en La Merced y donde el acceso del público es libre.

Entrar ahí transporta al visitante en un viaje en el tiempo con solo ver la antigua casona colonial, ahora anexada a la Casa Bustamante, separada tan solo por un patio donde el mayor atractivo es gran ficus, el árbol refrescante que parece cobijar con su sombra a todos los que allí ingresan.

Retrocediendo en la historia, uno se remonta hasta 1565 cuando se formó la Casa Nacional de la Moneda y desde entonces su transformación fue constante, lo que puede ser visto en la exhibición que es posible de visitar en horario de 09:00 a 17:00 horas, de lunes a viernes.

BILLETES. Los billetes del Banco de Arequipa, instalado en 1871 son uno de los atractivos de la sala que antecede al ambiente donde se han colocado las monedas que forman parte de la Serie Riqueza y Orgullo del Perú que el BCR ha lanzado en los últimos cinco años y entre las que destaca a nivel mundial, la dedicada al Monasterio de Santa Catalina, en Arequipa.

El coordinador de la muestra, Vidal Silva, refiere que la refacción tuvo como único fin rescatar los ambientes de la casona y poner en valor algunas de las piezas de arte que fueron adquiridas por el banco en muchos años.

Así, cerca de tres decenas de pinturas de la Escuela Cusqueña coronan las paredes de los dos salones ambientados para tal efecto y donde además destacan dos bustos (Cristo y La Inmaculada) de escultores de Andalucía y donde lo que prima son los ojos de vidrio y dientes de leche. 

Para los más pequeños, la sala interactiva es el punto ideal y donde además de aprender pueden jugar con rompecabezas, cartones de memoria y hasta sacarse una fotografía con un bello arcángel pintado justo a su medida, justo antes de pasar a la sala donde se exhiben armas rituales de la cultura Wari y hechas en cobre.