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Mientras en la zona de represas las precipitaciones pluviales son escasas, en zonas como la parte suroriental de la ciudad, la presencia de fenómenos inusuales, como granizo, causan estragos en el agro y algunas viviendas.

La tormenta eléctrica del último miércoles, además del temporal del domingo 01, dejaron daños de gran magnitud en localidades como Polobaya y Quequeña. En el primer caso, el daño es tal que su alcalde, Toribio Choque declaró en estado de emergencia el distrito.

Se estima que la granizada mató el 95 por ciento de los cultivos, un daño de gran magnitud para los pobladores que se dedican a la comercialización de estos productos.

En igual porcentaje fueron afectadas las viviendas, construidas, en general, a base de adobe.

El último informe de la Oficina de Defensa nacional y defensa Civil del Gobierno Regional, que dirige Nancy Quiroz, da cuenta de la afectación de 550 familias, de ellas, 197 agricultores son los más perjudicados con la pérdida de sus cultivos.

Defensa Civil coordinó con el alcalde la entrega de mil 600 frazadas, 100 calaminas, 18 bobinas de plástico y 3 mil 300 sacos terreros a fin de mitigar la calamidad y más aún, ante el anuncio de nuevas precipitaciones.

En tanto, en Quequeña la lluvia produjo el colapso de una tubería de 400 metros, por lo que dejó sin agua a toda la población. Hasta ayer el problema seguía, confirmó el alcalde José Palomino.

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