El arquero arequipeño del Sport Boys que suspendió su boda por el COVID - 19

Por Omar Cruz.

Jonathan Medina Angulo es un arquero arequipeño que juega desde el 2019 en el Sport Boys del Callao. Tiene 27 años de edad y su estatura de 1.89 metros llama la atención en los campos de juego. Aparte del fútbol le apasiona el básquet y la cocina.

La pandemia del coronavirus golpea duro a la población y Medina recibió uno fuerte. El matrimonio con su novia Carolain Ramírez (22) tenía que realizarse el 8 de abril, un día antes de Jueves Santo, pero por el estado de emergencia sanitaria se suspendió hasta nueva fecha.

Se comentaba que se casaría en abril, ¿era cierto?

Me dejaron vestido y alborotado. La boda civil y religiosa tenía que realizarse el 8 de abril, pero todo se suspendió por el coronavirus hasta el próximo año. Hablé con ella y esperaremos que todo pase, por lo pronto enero o mediados del próximo año sería la nueva fecha del matrimonio.

¿Tenía permiso del club para la boda?

Tenía la aprobación de los profesores. Justo se cuadró la fecha para que no se cruce con un partido del campeonato, tenía que ser a mitad de semana, un día antes de Jueves Santo. Sin embargo, no tuve perjuicio económico con el alquiler del local, comprendieron la situación. La boda fue planeada hace dos años, pero con mayor intensidad desde hace un año.

¿Cómo conoció a su futura esposa?

Hace tres años en Cusco, cuando jugaba en Real Garcilaso (Cusco FC). Ella es de Juliaca (Puno) y vivía en Cusco. La conocí por amigos en común, conversamos y nos dimos cuenta de que éramos el uno para el otro. Como pareja el 25 de mayo cumplimos tres años juntos y será para toda la vida.

¿En qué ocupa su tiempo mientras está en casa?

Yo soy cocinero, comencé hace un año la carrera de cocina en Lima a la par con el fútbol. Estoy perfeccionando la sazón durante la cuarentena. Me gusta la cocina internacional, con mi novia planeamos tener una cadena de restaurantes porque también está relacionado a la comida. El fútbol no dura para siempre, así que tenemos que aprovechar el tiempo al máximo.

Dicen que nadie es profeta en su tierra, desde el 2019 juegas en Sport Boys y te va bien en las estadísticas del campeonato.

Es distinto jugar fuera de la tierra y en especial en Boys. La acogida es grande, un club con hinchada y mucha historia. Entro a la cancha y tengo un respaldo grande que me motiva a hacer un partido. Mi contrato finaliza el 2022 y veremos si continúo en el club rosado o busco otro horizonte en el fútbol.

¿Sentiste que no había oportunidad en el FBC Melgar?

Quería jugar y en Melgar no podía, así que opté por salir en busca de oportunidades. Sin embargo, no olvido cuando llego a Melgar, fue gracias a los profesores Ernesto Vera y “Rocoto” Medina. “Palito” trabajaba en el colegio La Salle y me llevó a Melgarcito de la Primera División del Cercado y ahí comenzó todo. Se puede decir que me descubrieron junto a al profe Pedro Requena.

En el Torneo Apertura de la Liga 1 tuvieron un buen comienzo, ¿creyó que este 2020 era su año?

Fue un buen inicio de titular en las seis fechas, ahora nos toca empezar de cero por la suspensión de la Liga 1. A mediados del 2019 me fue muy bien también.

Los clubes reducen los montos de los salarios de los jugadores, ¿cómo les va en Sport Boys?

Negociamos con la administración, se manejan números, pero no hay nada concreto hasta ahora. La institución está bien, son responsables, tratan de cumplir con sus jugadores.

¿Se acostumbró a vivir en Lima?

El año pasado fue complicado porque estaba solo, pero este segundo año es mejor. Con mi novia es más fácil.

¿El básquet es otra de sus pasiones?

Me encanta el básquet. Llegué a la selección nacional de básquet en la categoría cadetes (14). Fuimos a un Sudamericano en Venezuela donde quedamos terceros, incluso le ganamos a Brasil. La mayoría medía dos metros y en mi caso tenía 20 centímetros menos.