Alca, el pueblo de los claveles y sus necesidades

Una mirada de humildad y esperanza. Con las manos desgastadas, la piel curtida y callos en los pies, producto de su incansable labor en la tierra, varones y mujeres, en su mayoría adultos mayores, formaron filas portando claveles en la mano para entregárselos a la gobernadora Yamila Osorio como símbolo de agradecimiento por su visita.

“Significan cariño, amor y respeto”, aclaró Agustín Mollo, agricultor del distrito de Alca, Provincia de La Unión.

Mauricia Huacte, otra pobladora, agrega que los claveles son parte de su identidad y los siembran en su huerta porque muestra lo que son, un pueblo unido, luchador y sobre todo de trabajadores.

WACACHUTAS. Alca es un valle a 2 mil 750 metros sobre el nivel del mar y está a aproximadamente 40 minutos de Cotahuasi, capital de la provincia de La Unión. Tiene 4 anexos y sus 3 mil habitantes se dedican a la agricultura y ganadería, pues no en vano se hacen llamar como la tierra de los “wacachutas”, lo que significa que los agricultores labran la tierra con la ayuda de los vacunos.

El valle produce papa, maíz, habas, olluco, kiwicha, quinua entre otros, pero esta producción no puede ser comercializada debido a la falta de vías de comunicación y transporte.

“Tenemos que caminar hora y media para trasladarnos del anexo de Alca a Cahuana, por eso necesitamos transporte urbano”, dijo Mauricia Huacte. De igual forma, requieren del asfaltado de la carretera de Luicho a Cahuana.

En este pueblo de 180 años, los anexos aún no cuentan con agua y desagüe a domicilio, “los silos han colapsado” se apresuró en intervenir un vecino.

Cual niños que necesitan ser escuchados y atendidos, los pobladores se agruparon al rededor. Con una mirada de esperanza quisieron aprovechar la presencia de un medio de comunicación (Correo) y los adultos mayores empezaron a hacer sus pedidos.

“En Cahuana, Allahuasi, Huillac, tampoco tenemos desagüe. Se acerca el auge del turismo y no tenemos para atenderlos”, agregó Dante Ybarhuen, presidente de la asociación de Criaderos de Vicuñas.

Ybarhuen también mostró la deficiente atención en la posta del distrito por la falta de medicinas.

VIOLENCIA. En definitiva, Alca es un pueblo que necesita atención, como enfatizó ante la gobernadora el comisario Vicente García.

Solicitó la donación de neumáticos, pues el único patrullero que tiene presenta constantes fallas que le impiden llegar a tiempo a las emergencias.

En el pueblo de los claveles y wacachutas no hay robos ni asaltos, pero sí violencia familiar. El comisario señala que la causa es el alcoholismo y al menos 3 por mes se formalizan con una denuncia.

El burgomaestre del distrito, José Alberto Loayza, manifestó que su prioridad es trabajar en el mejoramiento y construcción de los canales de regadío para evitar que los comuneros pierdan sus siembras a consecuencia del Fenómeno El Niño.

Sin embargo, también dijo que se trabaja un proyecto para la instalación del saneamiento básico de los aproximadamente mil 500 comuneros.

TURISMO. Alca está en medio de cerros y árboles, su paisaje es acogedor. Sus principales atractivos son los baños termales de Luicho, pues ofrece a los visitantes un descanso relajante, donde la temperatura del agua llega de 33 a 44 grados centígrados. También están las ruinas de Tiknay y las de Ccalla, desde las cuales se observan los paisajes.

CARRETERA EN MARCHA.

El valle de Cotahuasi comercializaría mejor sus productos si no fuera por el mal estado de su carretera hasta Chuquibamba. El alcalde de la provincia de la Unión, Benjamín Barrios, espera que al siguiente mes el Ministerio de Transportes y Comunicaciones adjudique la buena pro para empezar con el asfaltado de aproximadamente 115 kilómetros.

La gobernadora regional Yamila Osorio Delgado, recordó que la licitación del proyecto se retrasó por las observaciones que presentaron las empresas postoras, pero espera que en un año Cotahuasi tenga su vía asfaltada.