En el distrito de Cabanaconde, en la provincia de Caylloma, el gobernador de Arequipa, Rohel Sánchez, rindió ayer cuentas de su gestión en la primera audiencia pública de este año. En el lugar fue criticado por la falta de obras de envergadura y respondió que estas no se ‘hacen de un día para otro y que tiene que ceñirse a las normas.
La autoridad inició mencionando que su presupuesto es limitado y detalló las obras en ejecución: la represa Iruru que -según Sánchez- en junio se pondrá la primera piedra; la planta desalinizadora en Chala, que ya tiene un presupuesto, pero aún no se construye; el programa Arequipa-Caylloma para impulsar el turismo en el Colca que incluye 33 proyectos, pero solo 17 fueron declarados viables.
Otra obra mencionada fue la vía Arequipa-La Joya, que aún no está terminada y según la autoridad regional ya cuenta con presupuesto para el tercer componente y que la culminación ‘dependerá de las manos del privado’. Sobre el hospital Goyeneche resaltó que la inversión es de Estado a Estado, ya que Francia tomó el proyecto.
Sobre los expedientes de saldos de obra de los hospitales Maritza Campos y Camaná, Sánchez afirmó que el presupuesto fue asegurado por el Ministerio de Economía y Finanzas para su ejecución. “Todo está encaminado”, sostuvo.
PROYECTOS
El gobernador reafirmó su posición sobre la ubicación del nuevo Instituto Regional de Enfermedades Neoplásicas (IREN) Sur, de que no será donde está la sede actual como lo pide el cuerpo médico. “Es una decisión tomada”, enfatizó Sánchez, agregando que el terreno Umapalca en Sabandía cumple con todo y solo faltaría el cambio de uso de las tierras.
Sobre Majes Siguas segunda etapa reafirmó que está encaminado porque el Ministerio de Desarrollo Agrario lo tiene considerado en la resolución ministerial N° 0137-2025-MIDAGRI, además de otros proyectos: Majes Siguas I Etapa, Presa Tambo, Yurapaqcha (Ex Pampas Verde), Río Tambo (Ex Yanapujio) en Islay, e Iruro (Caravelí).
MINERÍA
Sobre los conflictos mineros en Caravelí, reiteró su pedido de la instalación de una mesa de diálogo multisectorial, asegurando que es la solución, antes de un estado de emergencia. Lo que busca es que se regulen la entrada de explosivos, armas y lleguen a mejorar el control en las zonas mineras.
Rohel fue cuestionado por el bajo avance de ejecución presupuestal que es de 34.5 % en cinco meses y respondió que: “Las obras no se ejecutan de forma lineal responden a una planificación”.
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