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El llanto y las súplicas de los enfermos COVID-19 por un balón de óxigeno, una cama o atención médica u otros insumos en el hospital Honorio Delgado, han atraído a los vendedores informales.
Muchos de ellos, padres de familia, con la intensión de ganar algunos soles y llevar comida a casa, arriesgan sus vidas al exponerse diariamente de contraer la enfermedad aún sin cura. El hambre o la avaricia, está presente.
La situación en el hospital de EsSalud Carlos Alberto Seguín Esobedo, no es tan caótica, pero también hay presencia de informales.
DESCONTROL. A pocos metros de la puerta de ingreso al hospital COVID-19, en la Av. Daniel Alcides Carrión en el Cercado, un grupo de comerciantes, madres de familia, ofertan mascarillas, protectores faciales y alcohol en gel a todos los que ingresan o salen del nosocomio desde médicos, enfermeras, pacientes y sus familiares. Lo único que les protege, son unas cubrebocas de telas.
Al preguntarles si no tienen miedo a contagiarse, algunas optan por callar y otras por decir que tienen que trabajar por necesidad.
El panorama al cruzar la calle, donde hay policlínicos, laboratorios y farmacias, es peor.
No solo hay gran número de ambulantes con equipos de protección personal, sino otro grupo de comerciantes con alimentos (gelatinas, refrescos y otros, expuestos al público, sin medidas sanitarias.
La cantidad de personas en busca de atención y vehículos complican la situación ya que no existe control de ningún tipo en el lugar.
¿CONTROLES?. El subgerente de Promoción del Desarrollo Económico Local de la Municipalidad Provincial de Arequipa, Elvis Arias, indicó que todos los días, los policías y municipales realizan rondas en el lugar para disuadirlos pero en la zona no se evidencia ningún tipo de control.
Al ser cuestionado, el funcionario remarcó que si cumplen con retirarlos del lugar pero ellos, siempre vuelven.
“Se está trabajando pero podemos decir que hay personas que no entienden o son un poco irresponsables de exponer o comprarles también a ellos”, señaló el subgerente.
Agregó que hasta la fecha son más de 10 las veces que han intervenido el lugar y han decomisado productos a más de 100 ambulantes.
NEGOCIO. En los alrededores también existen carteles donde civiles o empresas que venden balones de oxígeno (llenos), reguladores de los tanques del gas medicinal y hasta medicinas naturales para tratar la COVID-19.
Correo cotizó con algunos de ellos, y los precios de los balones de oxígeno superan los 3 mil soles.
Cabe señalar que en el caso de los medicamentos naturales, no son recomendados por los profesionales de Salud.
MENDIGOS. En la misma vía, también existen mendigos quienes se las ingenian para conseguir algo dinero y cubrir sus gastos diarios. Algunos con caramelos otros con trucos de magia.
El panorama en el hospital de EsSalud Carlos Alberto Seguín Escobedo, ubicado en Cercado, es diferente.
El cierre de vías al transporte público contribuye a que en el lugar exista poco flujo vehicular, por ende menos tránsito de personas y comerciantes.