Autor con amplía producción literaria publicó recientemente un nuevo libro de relatos cuya esencia tiene entre sus orígenes la actual pandemia. (Foto: Difusión)
Autor con amplía producción literaria publicó recientemente un nuevo libro de relatos cuya esencia tiene entre sus orígenes la actual pandemia. (Foto: Difusión)

El escritor Heiner Valdivia publicó recientemente el libro “La plaga coronada y otros cuentos”, de la mano de Grupo Editorial Caja Negra, en el que aborda diversos temas relacionados a lo cotidiano, lo fantástico y el inevitable espectro de la muerte.

¿”La plaga coronada” es tu primera incursión en la narrativa? En ficción más extensa sí, anteriormente, en el 2018, había escrito un libro de microficción: ‘Insectario Doméstico’, fabulando un poco sobre los insectos, las situaciones humanas y las personificaciones que satirizaban todo lo que somos, pero este libro aborda más la aproximación del cuento en su tonalidad de juegos y trampas sobre la ficción, efectos y personajes, jugando con una diversidad de géneros, con la fábula misma, con un poco de relato experimental en su trayecto final, así como de la autoficción con sus lados de ironía y de farsa, y también mucho de cuento fantástico, de horror sobrenatural y mitología.

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¿Cuál fue el punto de partida para este libro? Empecé justo al inicio de la pandemia, cuando nos confinaron en nuestras cuarentenas, a mediados de marzo del 2020, y que fue como una medida de escritura y compromiso frente al avance de esta pandemia, ante el aislamiento y la soledad, pero también de acercarnos a la muerte y el dolor, el vacío y el miedo, previamente ya tenía esbozado algunos cuentos, creo que tenía unos tres por ahí que estaban refundidos en otros proyectos, ya luego los agregué en este libro, y todo salió de un solo tirón, en un lapso de vente días, también un poco como para olvidar el tiempo y la presión con la invasión de esta pandemia.

El libro toca temas desde lo cotidiano hasta lo fantástico. Así es, tiene una dinámica de variedad de géneros, puedes pasar de un relato de horror a uno de autoficción o de humor, no quería centrarme solo quizás en lo personal y lo biográfico, yo creo que eso ya abunda demasiado en la literatura peruana y mundial, hasta casi ya es como un ripio de psicología y de escritura de diván, quería indagar y jugar en otros espacios y texturas, aparte de que soy un gran lector del cuento fantástico y la narrativa breve, pero también sin dejar de explorar el lado de la infancia, la memoria y el cine mismo.

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¿Cómo te afectó personalmente la pandemia? A nivel emocional fue muy chocante, la carga de estrés, temor, ya cuando se extendían las cuarentenas ya uno sabía que esto podría quizás prolongarse más en el tiempo, que era algo que vino para quedarse con nosotros. Yo creo que nunca nadie de nosotros había pensado pasar por esto, una pandemia de proporciones globales, primero con la incidencia de un virus y luego con los encierros, la muerte y las restricciones, y yo creo que el libro refleja un poco ese sentir y malestar, porque tiene un aire de inquietud, de extrañamiento y zozobra ante lo que se desconoce, y de atmósferas, pero también un poco de nostalgia y humor.

¿Cuáles son tu próximos proyectos? Actualmente vengo culminando un poemario que se va a llamar: ‘Hexagramas’, que combinará la poesía visual con la textual, un poemario un poco más de corte breve y de voz cotidiana, y también desarrollando mi labor en el equipo editorial de la página web Gabinete Mabuse, que recién se ha lanzado este año de forma virtual, entre la gestiones, las colaboraciones y algunos escritos, después hay proyectos para finales de este año, tal vez otro libro de relatos y otro de poesía, pero eso ya lo veremos con el paso del tiempo.

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Recomiéndame algunas lecturas de cuarentena. Los libros que me sorprendieron en esta pandemia, bueno fueron muchos, pero recuerdo algunas de las lecturas que realice el año pasado, como el libro de Umberto Eco, ‘A hombros de gigantes’; ‘La locura que viene de las ninfas’, de Robert Calasso; ‘El arte mágico’ de André Breton; Los relatos de Kjell Askildsen; ‘Loco afán’ de Pedro Lemebel, ufff, en fin, fueron varias lecturas y gratos momentos los que pase al lado de esos textos.