Agentes de la Policía en la zona por declaratoria de emergencia. (Foto: Difusión)
Agentes de la Policía en la zona por declaratoria de emergencia. (Foto: Difusión)

Dos mineros fallecieron el martes al interior de la mina Calpa Renace, en Atico, en la provincia de Caravelí y en opinión del alcalde del distrito, Milton Medina, la declaratoria de emergencia, no sirvió para poner orden en los campamentos mineros.

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Esta vez no se trató de un ataque como lo ocurrido en de junio, cuando murieron 14 personas, sino presuntamente de una imprudencia.

Los hombres murieron por intoxicación, a consecuencia de la inhalación de gases al interior del socavón.

Se presume que dentro de los 2 kilómetros de las galerías quedaron los gases, producto del incendio que ocurrió el mes pasado, el que fue considerado como un ataque, asunto que es aún investigado por la Fiscalía.

El burgomaestre recordó que, luego de las 14 muertes, el acuerdo con los dirigentes y el Gobierno central fue paralizar los trabajos y esclarecer la situación legal de la concesión de Intigold, considerando que esta empresa se encuentra en proceso de cierre. La semana pasada, el presidente del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), Manuel Manrique, señaló que Intigold no puede extraer mineral, porque se encuentra en proceso de cierre de mina.