Mineros prohíben licor, burdeles y piden servicios básicos

Por norma comunal, en el centro poblado San Cristóbal, en Yanaquihua, provincia de Condesuyos, no se vende licor. Menos se permite la prostitución y los burdeles; y los menores de 18 años están prohibidos de trabajar en las labores mineras que son la columna económica del lugar.

Jesús Llerena, director del colegio multigrado del lugar, da fe de ello. “Es un pueblo tranquilo que no tiene esos vicios que se han visto en otros asientos minero. Por eso se debe atender a las necesidades de esta población”, manifestó.

Y es que en San Cristóbal, no tienen agua, desagüe ni energía eléctrica.

ORDEN. En sus más de 20 años la población trabajó en la informalidad, pero desde el 2017 tributan regularmente e informan de sus actividades a la Gerencia Regional de Energía y Minas luego de acogerse al proceso de formalización, que alcanzaron con el reconocimiento de su asociación: Atramiasan.

Esto también motivo el ordenamiento vecinal. El presidente del centro poblado, Ladislao Yanque indicó que hace falta servicios básicos, para las 800 familias que componen la comunidad.

Actualmente compran el agua por cisternas y prenden sus bombillas por cuatro horas de noche, con ayuda de un grupo electrógeno.

Ayer, en la sede del gobierno regional, los vecinos solicitaron que se atienda estos requerimientos que les llevaran a mejorar su calidad de vida.

“Podríamos tener una situación mejor con ayuda del GRA. Esperamos que nos atienda”, señala el dirigente.