Nuevas reglas para importar autos generarán desempleo

Los puestos de trabajo de más de 500 personas en empresas locales dedicadas a la importación de vehículos de segundo uso están en peligro desde que el Gobierno dictó nuevas regulaciones que dificultan traer vehículos ya estrenados en otros países.

“Más de quinientos trabajamos directamente con estos vehículos. Ni qué decir de la cadena de puestos indirectos que se manejan desde los puertos, tramitadores, almacenes y otros”, señala Luis Arce, empresario importador, quien afirma no traer más vehículos por los altos costos con las nuevas medidas.

DECRETO. Con el Decreto Supremo 005-2020-MTC (Ministerio de Transportes y Comunicaciones) se estipula para la importación de autos una antigüedad máxima de dos años, un tope de kilómetros recorridos y un incremento en el pago de impuestos.

Tales medidas son rechazadas porque hacen imposible el sostenimiento de sus negocios y no garantizan la libre competencia.

“Se le está quitando a la gente el derecho a elegir de dónde quiere comprar y a nosotros a competir con otros que venden autos. Con impuestos que suman el 85% del valor del auto, el negocio no podría prosperar y parece que se nos quisieran liquidar”, señala Eduardo Malaga, miembro de la Asociación de Importadores del Sur.

Para el empresario Willy Mamani los autos que traen, pese a ser de segundo uso, cumplen altos estándares de calidad, como los que se exigen en países como Estados Unidos o Corea del Sur.

“Si ya pasaron muchas pruebas sobre seguridad y calidad, ¿cómo es que aquí se impide su funcionamiento solo por sus años? Aquí se traen vehículos de calidad, pero no se puede pretender asfixiarnos. Eso solo beneficia a grandes corporaciones”, dijo.