En Forjadoras de la Esperanza preparan entre 150 y 200 platos al día para comensales de la asociación José Luis Bustamante y Rivero. (Foto: Cortesía)
En Forjadoras de la Esperanza preparan entre 150 y 200 platos al día para comensales de la asociación José Luis Bustamante y Rivero. (Foto: Cortesía)

Alternativas para preparar los alimentos ante el alza de precios de los productos de primera necesidad. En la olla común Forjadoras de la Esperanza del distrito de Cerro Colorado aderezan la comida con agua en lugar de aceite y cocinan con leña en reemplazo del gas, a pesar de que el balón bajó de precio en los últimos días.

Siempre da su grasita, pero el aceite está carísimo, con el agua se puede hacer el aderezo también. En la olla común nosotras cocinamos con leña, nos rinde más y la comida sale más rica. En cambio, el balón de gas nos dura dos días, no nos conviene económicamente”, afirmó Giovana Hancco Cruz, presidenta de la olla común Forjadoras de la Esperanza, situada en el sector cinco, pozo uno, de la asociación de vivienda José Luis Bustamante y Rivero del distrito de Cerro Colorado.

LEA TAMBIÉN: 677 colegios particulares pueden retomar clases presenciales

El apoyo de las autoridades comienza a bajar, mientras los comensales se incrementan. Con los pocos recursos que cuentan las socias de la olla común alimentan entre 150 y 200 personas vulnerables, la mayor parte son niños, adultos mayores y madres solteras.

Cada vecino o socia trae de su casa algunos víveres, juntamos y hacemos el almuerzo para 150 platos, por lo menos. Necesitamos víveres como arroz, azúcar, fideos, papas, aceite, leche, menestras, verduras y carne. Estamos usando huesos en los caldos y segundos para darle sabor a la comida”, señaló.

Al menos 40 socias de la olla común Forjadoras de la Esperanza se instalaron en un área verde al lado de un parque. El ambiente es improvisado con paredes de esteras y techos de calamina, pero lo suficiente para preparar los alimentos a las personas más necesitadas de la zona.

“Nuestra jornada se inicia a las ocho de la mañana, en el camino juntamos leña, palos y lo que falte lo compramos. Comenzamos a cocinar con los que cada socia pueda aportar. Normalmente hacemos platos con lentejas, sopas, segundos. La comida que se cocina es variada”, apuntó.

LEA TAMBIÉN: Piden a gobernador Elmer Cáceres Llica asumir responsabilidad

La olla común subsiste gracias al empeño de las mujeres que se juntan cinco días a la semana, pero ante la falta de apoyo, algún día el fuego de la cocina se extinguirá y los comensales dejarán de ir al lugar por un plato de comida, como ocurrió en el sector de la Autopista Arequipa – la Joya (Cerro Colorado) y los distritos como Mariano Melgar y Alto Selva Alegre.

Necesitamos apoyo para que nosotras podamos apoyar a los que menos tienen, a los más vulnerables de la pandemia. Hemos solicitado apoyo al Gobierno Regional de Arequipa y hasta la fecha no llega una respuesta, seguiremos esperando porque la fe es lo último que se pierde. La Municipalidad Distrital de Cerro Colorado nos entregó víveres de Qali Warma, pero la ayuda no es constante como la preparación de los alimentos que es de todos los días”, afirmó Giovana Hanco.

Cualquier tipo de ayuda a las socias de la olla común Forjadoras de la Esperanza puede  hacerlo de manera directa o llamando al número celular 910863387.