Pablo Nicoli propicia desde muy joven la creación de asociaciones, grupos y publicaciones culturales que han dejado huella en miles de lectores y cultores de la literatura. (Foto: Archivo del autor)
Pablo Nicoli propicia desde muy joven la creación de asociaciones, grupos y publicaciones culturales que han dejado huella en miles de lectores y cultores de la literatura. (Foto: Archivo del autor)

En tiempo en que las nuevas generaciones van olvidando a los escritores que formaron la cultura en Arequipa, es bueno saber que varios de ellos, formados en el siglo pasado han dado el paso al ciberespacio y están activos, continuando su labor narrativa, como es el caso de Pablo Nicoli Segura.


¿Cuál considera que fue el acto o suceso que determina en usted el decidirse por ser escritor? Pues primero la lectura de grandes clásicos como Verne, Salgary, Poe en mis primeros años como lector aun insipiente y en segundo término la lectura de leyendas arequipeñas en el salón de clases, en la década de los 70s, por ejemplo, las narraciones sobrenaturales del arequipeño Francisco Ibáñez y también de Ricardo Palma, con respecto a nuestra ciudad.

En 1986 forma la “La Asociación Juvenil de Escritores” ¿Qué destaca del aporte del grupo a la literatura nacional? A la literatura nacional probablemente poco, porque en Lima no tienen interés en lo que se hace en provincias y en otros departamentos igual, por falta de difusión. La asociación en ciernes, lo que logró fue a nivel local y formó a futuros escritores, algunos trascendieron más que otros.

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Durante mucho tiempo tuvo una librería en la llamada Casona de San José, ¿Fue difícil mantenerla en el tiempo, acaso por la disminución de lectores? Al contrario, cuando inicié actividades en la librería La Casona del Libro, me sorprendió la cantidad de lectores interesados en el sistema de alquiler de libros y lo atribuí al costo –oneroso- de los libros comprados en librería, sobre todo si eran importados –promedio- un 10% de sueldo mínimo. Me sorprendió también el interés por la temática lectora sobre Arequipa.

Por ese tiempo también se forma el grupo “Los Minotauros” ¿Cómo fue la experiencia de poder publicar artículos en Arequipa al Día por parte del grupo? Bueno, supongo que fue una experiencia enriquecedora. Hablando solo por mí, yo ya había publicado en los suplementos de ese diario en varias oportunidades y, claro, siempre es una satisfacción saberse leído por miles de personas, parte del ego.

¿Cuáles fueron los semanarios que dirigió y qué corte tenían? Dirigí como cinco diferentes, pero solo el semanario Fantástico de Arequipa Al Día y el semanario Enigmas del diario Noticias –que le sucedió- fueron realmente exitosos. El corte siempre fue la temática sobrenatural, la de Arequipa y el mundo, y también la promoción de las artes en general como plus.

Grupo Kosmogonía es una tercera asociación que conforma, ¿lograron la publicación de libros? Si, publicamos tres libros consecutivos y trabajando sábado a sábado de manera profesional, con horario e intercambio de ideas y conocimientos. Los libros fueron: El Umbral, El Lado Oscuro de la Luz y La Sombra en el Sillar, todos agotados.

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¿Qué es lo que destaca en sus escritos?  Tocar temas sobrenaturales o de aventuras creo que llaman mucha atención del lector y la mejor forma de presentar estos escritos en de una manera franca y de narrativa sencilla, la finalidad es hacer que el lector pueda regresionar al pasado.

¿Cuántos libros hasta el momento lleva publicados y cuál es su próximo proyecto editorial?  En físico tengo 20 libros publicados y ya escritos y en formato virtual tengo cinco más, producto de todo el tiempo que nos otorga la pandemia y de mi preferencia por la temática arequipeña y sobrenatural, además de su historia anecdótica y sus leyendas. Me pueden ubicar por redes sociales por mi nombre.


Nota. Algunos críticos, como Walter Arias considera a Nicoli “como un Julio Verne que en lugar de desplazarse al futuro se hace regresionar al pasado, en que se fusionan la historia y la fantasía; o bien como un Alfred Hitchcock, que nos pone los pelos de punta mezclando la ironía y el terror con finales impensados. La literatura de Pablo Nicoli es en suma una producción sui generis en la localidad, la región y por qué no de todo el país; que nos instruye, nos divierte y nos ilusiona, a seguir como él, ese mundo fantástico que todos llevamos en nuestra propia mente”.