Dos buzos debidamente equipados ingresó a la zona más profunda del lugar ubicado en la catarata Pailojen del mencionado distrito. (Foto: Difusión)
Dos buzos debidamente equipados ingresó a la zona más profunda del lugar ubicado en la catarata Pailojen del mencionado distrito. (Foto: Difusión)

Después de 22 horas, el cuerpo de la adolescente de iniciales V.H.M. (15) fue recuperada ayer a las 10:40 horas de la zona más profunda de la laguna situada en la catarata Pailojen, en Polobaya. La joven, junto a su prima, también menor de edad, ingresaron el 1 de noviembre a la lagunilla, pero minutos después del mediodía comenzaron a hundirse y solo una de ellas logró salir. Los padres y otros bañistas intentaron rescatarla, pero todo esfuerzo fue en vano.

Los policías de la comisaría de Polobaya acudieron al lugar, uno de ellos que recibió cursos de salvataje ingresó al agua una y otra vez, pero no logró dar con el cuerpo. Agentes de la Unidad de Rescate, Alta Montaña y dos buzos iniciaron ayer a las 8:40 horas las labores de búsqueda y dos horas después lograron llevar a la superficie a la menor de edad que se encontraba sumergida cuatro metros.

El último recurso de la Policía y las autoridades del distrito era desaguar la laguna con maquinaria pesada, a pesar de que los pobladores de Polobaya no estaban de acuerdo porque temían que desaparezca el lugar que se convirtió en destino para los visitantes.

LEA TAMBIÉN: Francisco Sagasti: “Demostré que nos podemos gobernar bien”

El obrero Mario Huanaco (41) junto a su esposa, hijos y sobrinas dejaron su hogar situado en el distrito de Cerro Colorado para pasar un día de familia en la catarata de Pailojen, el feriado largo por el Día de Todos los Santos era el momento preciso para conocer este destino turístico.

Sin embargo, la tranquilidad terminó cuando una de sus hijas se ahogó. No se movieron del distrito de Polobaya y pasaron la noche en un local del municipio que el alcalde Luis Gonzales habilitó.

Pobladores de la zona afirman que hace cinco años un turista extranjero desapareció en la laguna, hecho que reforzó la leyenda urbana que en el lugar existe una sirena. “Al turista nunca lo encontraron. Si se deja ropa desaparece”, afirmaron.