Santa Teresa, primera doctora de la Iglesia Católica
Santa Teresa, primera doctora de la Iglesia Católica

¿Sabías que en el  hay una pintura del siglo XVIII, que resalta el valor de la sabiduría femenina, presentando la imagen de una monja que instruye a un grupo de hombres?

Santa Teresa de Jesús, quien reformó la Orden Carmelita en el siglo XVI, fue una mujer extraordinaria para su tiempo. Se conoce que en aquella época, muy pocas personas sabían leer y escribir, y Santa Teresa aprendió a leer desde muy niña, lo que sumado a su vocación religiosa, intelecto y voluntad, la convirtieron en una persona muy versada en diversos temas, especialmente los de naturaleza espiritual, narrativa y poética. Santa Teresa fue nombrada como la primera Doctora de la Iglesia Católica, por la sabiduría y la trascendencia de sus enseñanzas.

En esta pintura, podemos ver a la Santa en lo alto de un púlpito, luciendo en la cabeza un birrete doctoral y, en actitud muy seria, dictando cátedra y discutiendo ante un grupo de puros hombres, letrados todos, entre los que se ve a un Cardenal, un dominico, un carmelita, un jesuita, un franciscano, un mercedario y varios maestros y estudiantes, que aprenden y agradecen sus conocimientos.

Este cuadro, debe de haber sido chocante para muchos hombres en el siglo XVIII, tiempo en el que se pintó y en el que las mujeres estaban injustamente relegadas a un segundo plano. Aun así, el desconocido pintor de esta obra graficó con claridad, como podemos ver, el innegable aplomo con el que esta santa mujer, explicaba, ante un público masculino, las verdades de las que estaba convencida.

En la cartela de la parte inferior, se puede leer: “Sentada Teresa en su cátedra, disputa con los más sabios doctores, quedando admirados de oírla, aplaudiendo tan celestial doctrina. Y tuvieron que aprender mucho de su soberana escuela, dando gracias al Creador, que la dotó con tanta sabiduría”.

En aquellos tiempos, existía el machismo y las mujeres no participaban en debates.


Ficha Técnica

Ubicación. Este cuadro está en la Sala de la Orden del Carmen, del Museo de Santa Teresa

Pintura. Fue pintado al óleo sobre un lienzo.

Origen. Se pintó en el Siglo XVIII, bajo la influencia de la escuela cusqueña.

Autor. Un pintor desconocido.