Terminal de empresa CORATTSA dará mil puestos de trabajo

Más de mil empleos directos ofrecerá el terminal terrestre que construye la empresa CORATTSA en la carretera Yura, cruce con la vía Arequipa-La Joya. La obra está asegurada por los empresarios del servicio terrestre más importantes del país, según reciente reunión de accionistas celebrada en Lima.

Se tiene un capital inicial de 4 millones de dólares, los cuales aumentarán a 12 millones con proyecciones para alcanzar un patrimonio de 40 millones de dólares, cifra jamás antes invertida en Arequipa, señaló el asesor legal de CORATTSA, Rosendo Valera. Sin embargo, surgieron problemas en torno a una porción del terreno que ocupa la empresa de transportes.

PROBLEMAS. El jurista dijo que funcionarios de la Municipal Provincial de Arequipa, en la época en que Luis Cáceres Velásquez fue alcalde, cometieron irregularidades en coordinación con servidores de Registros Públicos, que alcanzan hoy a este proyecto, que se levanta sobre un área de 36,900 metros cuadrados ubicados en el C.I. Las Canteras.

Estas irregularidades se tradujeron en la Resolución Nro. 129-R del 2 de febrero de 1988, por la que se habilitaron terrenos en la zona sin el visto bueno de las subgerencias de Desarrollo Urbano, Asesoría Jurídica ni de la División de Asentamientos Humanos Regulados. Solo se consignó un sello se asesoría de alcaldía, lo cual invalida la resolución, toda vez que el asesor legal no tiene responsabilidad alguna en el TUPA municipal.

El abogado explicó que Registros Públicos no cauteló la fe registral y dio paso a la inscripción del predio el mismo 2 de febrero de 1988, no obstante que existía la Ficha Registral Matriz Nro. 0162192, inscrita el 16 de mayo de 1984 a nombre de la compradora primigenia, Nelly Adelaida Araníbar Gonzáles, dándose una nueva Ficha Registral Nro. 06156542, el 20 de setiembre de 2001.

El abogado de Coratta señaló que la duplicidad de fichas registrales generó también la expectativa del supuesto derecho de propiedad de Luis Alberto Rodríguez Málaga, sobre un terreno de casi 1,000 m2 del que jamás tuvo la posesión ni ejerció la ocupación que exige el derecho registral, la doctrina y jurisprudencia. Además, a principios de 1990, 2 mil 581 metros, de los 39 mil que ocupa el terminal de CORATTSA, habían sido invadidos por Agripina Tipula Tipula y allegados.

Explicó que CORATTSA compró directamente el terreno de 36,900 m2 a la dueña Adelaida Araníbar Gonzáles, el 4 de julio de 2013, conociendo de la existencia de los invasores mencionados y a los que Corattsa pagó 195 mil dólares por sus predios.

Entre estos, no se encontraba el ciudadano Luis Rodríguez Málaga, quien en 2012, en pleno conflicto con Tipula y otros ocupantes, transfirió sus derechos a nuevas posesionarias en un área total de 180 m2 a cada una. Estas son Reyna Estofanero Mamani y Flor Rodríguez Igunza, las que junto a Agripina Tipula Tipula quedan como únicas posesionarias del referido terreno.

Finalmente, dijo que cuando CORATTSA construía su cerco perimétrico apareció Luis Rodríguez denunciando policial y judicialmente a la empresa alegando supuesta propiedad sobre los casi 1,000 m2, pero dicha ficha registral es reciente, debiendo prevalecer la más antigua, que es la que tiene CORATTSA, por lo que la empresa está solicitando ante la SUNARP Arequipa declare la nulidad de la partida electrónica duplicada Nro. 06156542 inscrita el 2001 que superpone la ficha registral primigenia.