Vargas Llosa: “El mundo de Borges es muy alejado del mío”
Vargas Llosa: “El mundo de Borges es muy alejado del mío”

En conversación con Raúl Tola, Vargas Llosa contó en el Hay Festival Digital cómo conoció al escritor argentino Jorge Luis Borges.

Fue en 1963, durante una gira que Borges hizo a Francia, en una Europa de posguerra a la que América Latina le sonaba como una tierra salvaje, de pistoleros y matonismos. Allá, Borges deslumbró a los franceses, a tal punto que sus tres presentaciones estuvieron abarrotada, incluyendo a escritores muy conocidos de la época, que fueron atraídos por la brillantes del autor de ‘El Aleph’.

La prensa francesa le dedicó muchos reportajes y aparecieron nuevas ediciones de sus libros. “Este reconocimiento extraordinario saltó hacia América Latina, prendió aquí y mucha gente comenzó a leerlo y reconocerlo. Su gran prestigio viene de ese viaje. Fue emocionante para un latino estar en Francia y ver el deslumbramiento que causó a los franceses este señor casi ciego”, cuenta Vargas Llosa.

POLÍTICA 

Vargas Llosa también mencionó el lado más oscuro de Borges, su admiración por regímenes golpistas: “Él fue víctima del peronismo. Celebró muchísimo el golpe militar contra Perón y sentía simpatía con los militares, tuvo héroes militares, y ese mundo militar aparece en sus cuentos. Aceptó ser condecorado por Pinochet en un momento donde asesinaba, torturaba”, dijo el premio Nobel.

POLÍTICA

El autor de ‘La ciudad y los perros’ admite que a pesar de la admiración que siente por Jorge Luis Borges, su literatura es muy diferente a la que él escribe. “El mundo de Borges es muy alejado del mío, que soy mas bien realista. 

El tipo de escritor que trato de ser es muy distinto del de Borges, lo que no me impide admirarlo y reconocer en él a un escritor extraordinario, que hizo una revolución sin precedentes en la lengua, en el español, de extraordinaria prosa, esa manera tan sutil en la que presentaba sus cuentos”, reflexionó.

Vargas Llosa pudo entrevistar finalmente a Borges en su departamento de Buenos Aires, en 1983, encuentro que le serviría para sellar su admiración por el maestro argentino de la literatura.