Infierno en la naturaleza: ola de incendios forestales en Perú
Infierno en la naturaleza: ola de incendios forestales en Perú

Los incendios forestales sucedidos esta última semana en los sectores de Collpani y San Antonio de Torontoy, en el distrito de Machu Picchu, son parte de los más de 150 registrados por la Compañía de Bomberos del Cusco en lo que va del año en esta región, según informó Jesús Valdivia, jefe de la institución.

Los incendios producidos en estos sectores dejaron a su paso daños ambientales. Una de las consecuencias fue la inmensa humareda que cubrió un 70% de la ciudadela inca de Machu Picchu, donde las cenizas llegaron por acción de los vientos, provocando la contaminación del aire del lugar. Además, más de 80 hectáreas de bosque resultaron perjudicadas.

El comandante Valdivia señala que la situación a veces se torna incontrolable porque se presentan incendios forestales en simultáneo, lo que impide a él y a su equipo atender todos los siniestros. “Nunca se han dado tantos incendios forestales en la región Cusco como en este año y esto va a continuar”, afirma.

CAUSAS DE LOS INCENDIOS. Los incendios forestales, que en Perú suelen presentarse en la costa, sierra y ceja de selva, tienen diferentes orígenes. Entre ellos están la acción del hombre y los fenómenos naturales. Una actividad muy común realizada por el hombre y que desencadena estos desastres es la de los agricultores, quienes en su afán por renovar sus tierras o ampliar sus fronteras agrícolas queman pastizales, acción que se sale de control y termina provocando un incendio forestal.

Otros factores son el fenómeno de El Niño, el calentamiento global y el efecto invernadero. Las altas temperaturas, pocas lluvias y sequías, consecuencias de estos fenómenos, contribuyen a que los incendios se originen y sean difíciles de extinguir. “La presencia de El Niño en nuestro país producirá una sequía muy fuerte que puede originar incendios forestales. Tiene un efecto directo”, señala Hugo Carrillo Vargas, ingeniero forestal del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor).

DAÑOS PERMANENTES. Los incendios forestales, además de dañar la flora y fauna con pérdidas de especies silvestres, causan un perjuicio permanente en el suelo en donde se originan y extienden. “El terreno donde se producen incendios forestales demora cientos de años para volver a ser utilizable y algo más que está respaldado por cifras estadísticas: donde ha habido incendios forestales y caen lluvias posteriores es muy probable que se presenten huaicos o derrumbes porque el suelo se desestabiliza”, sostiene Jesús Valdivia.

El comandante Valdivia afirma, también, que se han reportado pérdidas humanas este año. Una mujer y su hija murieron en la provincia de Quispicanchi, y un campesino en Chumbivilcas. Todos intentando apagar las llamas.

SANCIÓN PARA LOS INCENDIARIOS. El ingeniero Hugo Carrillo indica que la Ley Forestal y de Fauna Silvestre considera una falta muy grave provocar un incendio forestal que administrativamente puede ser sancionado con multas de hasta las 600 Unidades Impositivas Tributarias (UIT) y también es considerado un delito penal castigado con seis años de cárcel dependiendo de las consecuencias que el siniestro ocasione.