Varón baleado muere tras días de agonía

Luchó hasta el final, pero no resistió. Augusto Leguía Silvera (49) conocido como “Lunarejo” dejó de existir tras permanecer durante dos días en la Unidad de Cuidados Intensivos del Hospital Regional de Ayacucho, hasta donde llegó tras recibir un impacto de bala en la cabeza.

Según fuentes policiales el hombre se dedicaba a la venta y compra de terrenos en los últimos años en la ciudad de Ayacucho, por ello que la policía presume que se trataría de un crimen por disputa de tierras.

De las indagaciones policiales se sabe que Leguía Silvera fue atacado en el barrio Santa Elena, donde fue baleado a quemarropa a la altura de la cabeza que le originó un traumatismo encéfalo craneano que lo dejó en estado de coma y que ayer acabó con su vida.

Tras su deceso su cuerpo fue trasladado a la morgue de la ciudad, donde se efectuó la necropsia de ley.

JUSTICIA. Por su parte, la esposa del infortunado, exigió justicia a las autoridades para que este hecho no quede impune y descartó en todo momento que su esposo forme parte de una banda de traficantes de tierras.

“En un diario local están calumniando a mi esposo y aducen que era traficante de terrenos y portaba un arma, pero todo eso es mentira”, señaló.

Asimismo, presume que las personas que perdieron un juicio sobre unos terrenos son las que están detrás de todo esto, porque según cuenta, su esposo nunca recibió amenazas de muerte.