Contraloría detecta compra de útiles de aseo y bioseguridad contra COVID-19 sin justificación técnica y que nunca ingresaron a almacén. Proveedoras son de otros rubros y hay siete funcionarios con responsabilidad.
Contraloría detecta compra de útiles de aseo y bioseguridad contra COVID-19 sin justificación técnica y que nunca ingresaron a almacén. Proveedoras son de otros rubros y hay siete funcionarios con responsabilidad.

Un perjuicio económico de S/100 mil ha detectado la Contraloría General en el Gobierno Regional Áncash (GRA), durante el estado de emergencia COVID-19, como consecuencia del desembolso sin sustento para la compra de materiales de limpieza e implementos de bioseguridad que no ingresaron a la entidad regional, y que se sustentaron con facturas falsas de proveedores que son de otros rubros.

Según el Informe de Servicio de Control Específico, cuyo periodo de evaluación fue del 16 de marzo al 29 de mayo del 2020, se identificó que siete funcionarios tienen presunta responsabilidad administrativa, de los cuales cinco también tendrían responsabilidad penal.

SIN JUSTIFICACIÓN

El servicio de control evidenció que, en marzo, funcionarios de la Oficina Regional de Defensa Nacional Civil y Seguridad Ciudadana y de la Subgerencia de Recursos Humanos solicitaron, en el marco de la emergencia sanitaria COVID-19, un presupuesto de S/ 80 mil y S/ 20 mil, respectivamente, para ejecutar dos Planes de Apoyo Social de desinfección de zonas vulnerables en la sierra y costa de la región, y un Plan Local para la implementación de materiales de aseo y limpieza de la sede regional.

Sin embargo, pese a que ambas no contaban con las competencias para hacer tales requerimientos, obtuvieron los montos mencionados sin presentar la justificación técnica y legal que se requieren.

En el caso de la Oficina Regional de Defensa Nacional Civil y Seguridad Ciudadana, los planes de apoyo social no detallaban costos estimados ni las zonas específicas que se iban a desinfectar, solo mencionaba sierra y costa de manera general. Del mismo modo, el Plan Local de la Subgerencia de Recursos Humanos no establecía cantidades, especificaciones técnicas ni costos estimados. Tampoco se precisó las áreas o gerencias beneficiarias.

FACTURAS FALSAS

La comisión de auditoría del Órgano de Control Institucional (OCI) del Gobierno Regional de Áncash determinó que para financiar los mencionados planes, bajo la modalidad de encargos internos, se anularon partidas destinadas a la compra de repuestos y accesorios, papelería, útiles y materiales de oficina, entre otros.

Los funcionarios y servidores públicos involucrados presentaron boletas y facturas de ocho proveedores, sin embargo, cinco de ellos negaron haber vendido productos al GRA. Según la página web de la Sunat, los proveedores registran actividades económicas no relacionadas con los productos adquiridos.

Se compraron mascarillas guantes, lentes y cintas de seguridad, así como productos de limpieza y desinfección, pero no se acreditó su ingreso a los almacenes del gobierno regional ni su uso en la prevención del coronavirus. No obstante, los responsables presentaron actas de entrega, recepción y conformidad de los bienes y servicios efectuados.