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La verdad comienza a ver la luz en el caso emblemático del cruel asesinato del alcalde de  Francisco Ariza Espinoza y su asesor legal Henry Aldea Correa. A un mes de la tragedia que espantó a toda la región, se conoce que los sicarios se repartieron un botín de 20 mil soles.

Fuentes que han tenido acceso a la información de los avances de la Fiscalía Mixta de Nepeña revelaron algunos detalles de la investigación, ahora que los familiares necesitan saber si el crimen encontrará justicia.

Al parecer en este tiempo el equipo especial de la Dirincri avanzó mucho en relación a las personas que participaron en el crimen, detalles de cómo sucedieron los hechos y también a dónde nos llevan todos los indicios para señalar con más fuerza un móvil específico.

RECUERDE. El 20 de octubre, el cruce de la vía de ingreso al sector Huacatambo, en el distrito de Nepeña, fue el fatídico escenario de este doble asesinato.

Las víctimas se trasladaban en el vehículo de propiedad de Aldea Correa y fueron baleados por desconocidos. A los pocos minutos la unidad de transporte se incendió. Versiones extraoficiales en ese momento indicaron que los asesinos arrojaron una bomba molotov al vehículo.

Fuentes policiales indicaron que un testigo ofreció detalles importantes que podrían ayudar a dar con la identidad de los asesinos materiales. Según el testimonio de esta persona, los sicarios esperaron un poco más de una hora la llegada de sus víctimas. Ellos se apostaron en el cruce de Nepeña, al parecer esperando el aviso de que sus víctimas ya se encontraban en la zona que habían escogido para ejecutar el crimen.

Los testigos han descrito a los delincuentes: uno de ellos de aproximadamente 24 años y el otro sería un menor de edad. Este último, según los testimonios, habría sido el que disparó el balazo que impacto en la cabeza a “Panchito”, como lo conocían al alcalde, y acabó con su vida.

El sicario que asesinó al burgomaestre era delgado, de tez trigueña y vestía un bividí blanco con un pantalón azul, según la descripción de los testigos. En tanto, su acompañante tenía lentes y gorra.

En un primer momento los hijos del alcalde asesinado exigieron que se investigue al titular edil que fue inhabilitado, Jaime Casana. Aunque luego el hijo mayor Francisco Ariza Moreno pidió disculpas por lo dicho.

Sin embargo, en ese momento, Ariza Moreno consideró que sería “una falta de respeto” a la memoria de su padre si es que alguno de los cinco regidores de Samanco, asume la alcaldía de ese distrito, en reemplazo de su progenitor.

“Ellos ya saben, no voy a decir nombres, pero ellos ya saben quién fue el que llamó y dijo : ya está saliendo ( de la fiscalía de Nepeña) el día martes. Quién fue el que dio el aviso, ellos saben”, apuntó.

LOS IMPLICADOS. Lo que es público hasta ahora es que se había retenido a un menor de edad apodado “Takeshi” en un bar de Chimbote, a quien le encontraron el arma que se usó en el crimen.

Eso se determinó en una pericia de homologación. Aunque luego también se aclaró por la prueba de absorción atómica que este menor de edad no fue quien usó el arma en el hecho de sangre.

“Takeshi” fue enviado al Centro Juvenil de Rehabilitación Maranguita, en Lima.

Sobre este menor infractor, el jefe de la Región Policial de Áncash, general PNP Juan Gálvez, indicó que este formaría parte de una “organización delictiva muy bien organizada”. Incluso la banda estaría formada por policías.

La pericia al auto del abogado Henry Aldea pudo hacer ver que no fue incendiado sino que se prendió fuego por una fuga de gas.

LOS AVANCES. Correo se contactó con una persona que accedió a los avances de la investigación.

“Hay avances en el casoque van por buen camino, es cuestión de tiempo; por lo pronto se ha podido determinar que en el crimen participaron ocho personas quienes se fueron en dos autos, cuatro en cada uno”, comentó.

A pesar que nuestra fuente indica que estas ocho personas están identificadas, hasta ahora no hubo más detenciones.

Justamente, los testigos que han pasado por la fiscalía, según indicó nuestra fuente, han podido señalar que los sicarios que ejecutaron el crimen se repartieron 20 mil soles. “Ante todo estos avances, el móvil que tiene más fuerza es que mataron al alcalde por el manejo de la municipalidad”, indicó.

EXIGE. Correo se comunicó con Francisco Ariza Moreno, hijo del alcalde asesinado, quien mostró su indignación por los resultados.

“Si hay avances no estaremos contentos hasta que se ubique a los autores intelectuales, no es suficiente que solo atrapen a quienes dispararon”, remarcó.

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