Por unanimidad, los nueve regidores del anularon la normativa que prohibía a más de 3 mil feriantes y ambulantes, ejercer sus actividades en la vía pública. A esta decisión arribaron las autoridades durante una sesión extraordinaria convocada por el burgomaestre César Dávila Véliz, en respuesta a la presión de los manifestantes que radicalizaron su medida de protesta atrincherándose en la puerta de la municipalidad, impidiendo la salida de 36 trabajadores quienes pernoctaron dentro de las instalaciones.

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Tras sostener diálogos con los manifestantes, los efectivos de la PNP y el Ministerio Público de Jauja hicieron lo posible luego de 19 horas, para liberar a 36 servidores municipales, entre gerentes, administrativos, policías municipales, entre otros.

Los ambulantes negaron que se haya tratado de un secuestro y retención de trabajadores municipales, aseguraron que ellos no salieron del local por prudencia ante una masa de comerciantes indignados. Al cierre de esta nota no se sabía de denuncias penales por los incidentes antes reportados.

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Al término de la sesión, los feriantes y ambulantes festejaron con una marcha por la Plaza de Armas, la nulidad de dicha ordenanza que les permitirá seguir laborando en la vía pública.

Horas antes, más de mil comerciantes se amanecieron en las cercanías de la municipalidad protestando por la ordenanza, pues, a su juicio, laceraba su derecho al trabajo y menoscababa aun más sus ingresos económicos.

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