Cada año, los danzantes de huaylarsh en Huancayo se preparan con esmero para participar en los exigentes concursos, enfrentándose a otros conjuntos que llegan también desde Lima, pero, detrás de las impresionantes coreografías y música hay un gran esfuerzo económico. Los integrantes de los conjuntos invierten alrededor de S/500 para su participación en la temporada.

“Más o menos es una semana de participación en concursos de varios distritos. Para ello se contrata el bus y la orquesta. Se suelen hacer actividades para cubrir esos gastos”, contó Mariela Nolasco, integrante del conjunto La Gran Institución Virgen de Lourdes del Cerrito de la Libertad.

Otro danzante de huaylarsh, comentó que por la semana de concursos, ls orquestas cobran un aproximado de S/.16 mil, dependiendo al lugar de origen y número de músicos. Otra inversión fuerte es el bus que los transporta de un concurso a otro, cobrando un aproximado de S/.800 por día, el costo varía de acuerdo al tipo de bus.

El tema del vestuario, de acuerdo a los danzantes, es una inversión compartida, ya que el conjunto otorga los implementos básicos y el danzante tiene que comprar lo demás.

Para las mujeres, el gasto es más elevado, ya que solo el fustán hecho a mano, con el bordado de 30 centímetros, tiene un costo que supera los S/900, por lo que la mayoría optan en comprar uno hecho a máquina que bordea los S/220.

El papel de los padrinos

Cada conjunto suele tener ‘padrinos’ que son clave para aliviar algunos de los gastos, como la alimentación y/o accesorios de cada uno de los danzantes de huaylarsh.

“Generalmente, los padrinos son familiares, amistades, exintegrantes, seguidores que aprecian nuestro baile o socios. La voluntad de cada padrino es en la donación de casacas, el desayuno, almuerzo u otros implementos”, explicó Osmer Loroña, integrante del conjunto Dalia Huayta Barrio Unión Huancán.

Las orquestas

El otro lado de los carnavales lo viven los músicos miembros de las orquestas que acompañan a cada conjunto de huaylarsh antiguo o moderno. Ellos son contratados habitualmente para que acompañen durante la semana de concursos.

“Las orquestas también vivimos al máximo los concursos, porque prácticamente el conjunto y nosotros, somos uno solo. Y si nos tenemos que amanecer para la gran final, lo hacemos con mucho cariño”, dijo Erick Daviran, director de la orquesta Potencia Musical Clase A.