A un lado de la Carretera Central a la altura del Km 34, empresas de minería no metálica de Curicaca, límite entre La Oroya y Jauja, instalados en la zona alta de los cerros, explotan mármol y otros materiales realizando voladuras a metros de la vía donde pueden caer grandes rocas a los cientos de vehículos que pasan por este lugar.
Ante la denuncia de algunos vecinos, Correo llegó hasta lo alto del cerro donde se puede observar gran movimiento de varias maquinarias pesadas de mediana minería y tráilers que sacan el material para ser llevado a Lima, depredando el cerro, además de la instalación de una planta de sílice que realiza sus operaciones a orillas del rio Mantaro utilizando sus aguas para la limpieza de este material y a la vez contaminando el río que llega a varios distritos agrícolas del valle del Mantaro en Jauja, Concepción y Huancayo.
El Director Regional de Minería de Junín, Rolando Cano Andrade señaló que estas empresas comunales y pobladores del lugar no permiten la fiscalización con la excusa que los terrenos son de propiedad comunal sin que se pueda ingresar con el autoridad del agua ANA, la OEFA, la fiscalía ambiental para un trabajo integrado.
Así mismo Rolando Cano indicó que la Ley N°32213 que da la formalización y fiscalización de la pequeña minería metálica y no metálica al Ministerio de Energía y Minas solo los limitan.
“Con esta Ley nos atan de manos para realizar el control de este tipo de actividad en la región (...) Si el ministerio no puede fiscalizar las empresas de Lima ¿cómo podrá hacerlo en todo el país?”, finalizó.
