Las intensas lluvias registradas en los primeros meses del año han convertido en una verdadera odisea el acceso a los centros de salud para decenas de gestantes en las zonas más alejadas del valle del Mantaro. En respuesta a ello, el personal de salud ha optado por acudir directamente a las viviendas de las pacientes para atender los partos y así evitar complicaciones o tragedias.
“En la microred de Comas, por ejemplo, muchos caminos de tierra han quedado intransitables. Por eso, durante febrero, marzo y abril, se atendieron siete partos en domicilios o en pleno trayecto”, informó la obstetra Milagros Barra Flores, coordinadora de Salud Sexual y Reproductiva de la Red de Salud Valle del Mantaro (RSVM).
La situación es especialmente crítica en zonas como Yunca Chaquicocha, donde el personal debe trasladarse por más de 12 horas. “Hay casos donde la gestante llega con dilatación avanzada. Prácticamente va a dar a luz en el camino, por eso se opta por atender el parto en el centro de salud más cercano, aunque no sea de nivel 1.4 o en los mismos domicilios para luego ser trasladada junto al recién nacido al centro de salud a quedar en observación por alrededor de dos días”, explicó la especialista.
La Red de Salud Valle del Mantaro comprende cinco microredes, cada una presenta retos distintos, pero todas enfrentan un problema común: el hecho de que muchas gestantes no acuden al control prenatal oportunamente, algunas por temor, otras por desconocimiento.
“Lo ideal es que vengan antes de las 13 semanas de gestación, porque ahí podemos detectar riesgos, brindar suplementos como ácido fólico y asegurar un embarazo saludable”, recalcó la obstetra. Sin embargo, reveló que aún hay mujeres que llegan al centro de salud con 28 o hasta 40 semanas, muchas veces derivadas por clínicas particulares donde no se detectan a tiempo las complicaciones.
“No tenemos ninguna muerte materna registrada en lo que va de este año, gracias al compromiso del personal de salud”, afirmó la coordinadora de Salud Sexual de la RSVM, aunque precisó que se han identificado más de 350 gestantes con morbilidades maternas extremas, bajo seguimiento constante.