Un cerco de rafia es lo único que protege los bienes de la institución educativa N°364 del anexo de Huari, según se pudo registrar en fotografías ayer.
Según dijeron los vecinos de la zona, el cerco del referido plantel, antes era de pared de tapia y adobe que con el tiempo terminó por derrumbarse.
Ahora requieren los recursos para que el cerco sea reconstruido con material de concreto y así pueda brindar seguridad a los niños que estudian en la referida institución educativa.