No todos se alegran cuando llegó Jerí
No todos se alegran cuando llegó Jerí

La llegada del presidente transitorio del Perú, José Jerí Oré, a la ciudad de Huánuco generó descontento entre diversos grupos de pobladores, dirigentes de sectores públicos —como salud y educación— y opositores a la gestión del gobernador regional Antonio Pulgar Lucas. Los manifestantes expresaron su malestar debido a que sus quejas y reclamos no fueron atendidos durante la visita del mandatario.

En varios de los puntos que recorrió el presidente, vecinos y dirigentes esperaban poder dialogar directamente con él para exponer los problemas que afectan a sus comunidades, especialmente aquellos vinculados con la falta de atención del Gobierno Regional en zonas vulnerables.

“En la quebrada de Llicua hay 17 toneladas de tierra que, con estas lluvias, podrían generar una emergencia. Queríamos conversar con el presidente para que disponga una pronta atención”, señaló una vecina del sector alto de Llicua.

RECLAMOS JUSTIFICADOS

Los ciudadanos también manifestaron su preocupación por el abandono de las calles, la falta de apoyo a la agricultura y la ineficiencia en la gestión regional.

“El presidente llegó y se fue rápido. Los recursos no llegan como deberían. En asentamientos humanos como Dámaso Beraún seguimos respirando polvo. No hay resultados en educación ni en agricultura. Necesitamos un compromiso real del gobierno regional”, comentaron vecinos de Las Moras y Loma Blanca.

Mientras tanto, en el frontis de la Escuela Policial de Santa María del Valle, donde se desarrollaba el IX Consejo de Estado Regional, un gigantesco cartel fue desplegado por un colectivo ciudadano. En él se podía leer: “Sres. gobernadores regionales: al Perú no se le roba… ¡En Huánuco ya tenemos un ladrón!”.

Con este mensaje, los manifestantes cuestionaron los presuntos actos de corrupción dentro del Gobierno Regional de Huánuco, señalando directamente al gobernador Antonio Pulgar Lucas como responsable de las irregularidades denunciadas.