OEFA: Huánuco está jalado en el manejo de residuos sólidos y segregación
OEFA: Huánuco está jalado en el manejo de residuos sólidos y segregación

El Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) indicó que Huánuco está desaprobado en el manejo de residuos sólidos por la falta de voluntad política, para implementar los proyectos de rellenos sanitarios. Rosario Araoz Monzón, jefa de la Oficina Desconcentrada OEFA de Huánuco, indicó que parte de las experiencias exitosas registra la municipalidad de Juan José Crespo y Castillo, de Aucayacu, con su programa de segregación en fuente, botaderos de Pachitea, Umari, Lauricocha, Cauri, separación de residuos orgánico e inorgánicos en Dos de Mayo, a pesar del tratamiento rural.

La región solo registra dos rellenos sanitarios, las provincias de Ambo y Huamalíes, cuentan con terrenos saneadosy destinados al manejo de los desechos. “Los botaderos no tienen sustento legal, no cumplen la normativa; sin embargo en Huánuco es una medida de contingencia implementada incluso para 20 años de funcionamiento, que va contra la norma”, dijo. 

Las principales dificultades para construir un relleno es que las municipalidades compran terrenos no aptos para la recopilación de residuos o la falta de consulta popular, porque las personas creen que cuando hay un relleno sanitario existe contaminación ambiental y esa información es falsa, hay todo un sistema para el manejo de residuos que beneficia a las personas que están alrededor, explicó. 

En el marco del proyecto “Salvemos al río Huallaga”, la OEFA afianzará proyectos sostenibles desde San Rafael (límite con Cerro de Pasco) hasta Aucayacu, para que cumplan las competencias y cuenten con un relleno sanitario. Tingo María y Huánuco cuentan con proyectos avanzados. Instó a los vecinos a que paguen sus arbitrios, que sirven, precisamente, para implementar estos servicios y sensibilizar a las familias que segreguen los residuos para facilitar el tratamiento. “Necesitamos voluntad de ambas partes”, concluyó.

La Dirección Regional de Salud, señaló que el tiempo de vida de un botadero es de 5 años mínimo por cuestiones de salud.

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