En un operativo inopinado la Policía Nacional y el Ministerio Publico, intervinieron un pequeño campamento minero que tenía almacenado gran cantidad de explosivos y material peligroso, procedentes de Bolivia que venían siendo utilizados en la minería ilegal en el centro poblado Tulín, ubicado en el distrito de El Ingenio.
Las autoridades acudieron al llamado de los vecinos del centro poblado de Tulín, quienes denunciaron que las detenciones de explosivos eran permanentes, causando temor a la población y al allanar el campamento encontraron gran cantidad de cartuchos de dinamitas, mechas y fulminantes, en un ambiente muy pequeño de 3 por 4 metros, que venían siendo utilizados por un grupo de mineros informales, sin contar con la autorización respectiva.
Según señaló el fiscal de turno, José Meléndez Churasi, de la Segunda Fiscalía Penal de Nasca, los involucrados estarían inmersos en el delito de tenencia ilegal de materiales explosivos que es muy grave y tiene una pena superior a 6 años de prisión.
Sin embargo se trataría de un comercio ilícito a gran escala porque estos productos son regulados para su venta y traslado por lo que se debe hacer una investigación exhaustiva para conocer quiénes son los responsables de la comercialización.
De otro lado dijo, que también estarían incurriendo en minería ilegal, eso se determinara al verificar los permisos correspondientes.