Hermanitas viven en la miseria en Chincha
Hermanitas viven en la miseria en Chincha

Sumidas en el completo abandono, sin alimentos ni un techo digno que las cobije, fueron captadas tres niñas. La situación ha despertado la indignación de los moradores de la cuarta cuadra de la calle Fray Ramón, en el distrito de Pueblo Nuevo, donde en uno de los predios se refugian las hermanitas de 11, 6 y 5 años, que a través de la intervención de los vecinos fueron inicialmente rescatadas, pero luego regresaron a los brazos de su criticada progenitora.

Una ciudadana , indignada con la terrible situación de las menores, registró en video cómo vivían las niñas. Basura tirada en todo la casa, vivienda de cercado rústico, vestimenta sucia, niñas sin asearse y, lo más preocupante, es que no habían comido nada, pese a que la hora de alimentos ya había pasado. Estas pruebas fueron llevadas al Centro de Emergencia Mujer (CEM).

La diligencia emprendida por especialistas del área legal y sicología del CEM certificó que las hermanitas de iniciales V. M. G. M. (11), D. M. T. M. (6) y P. H. T. M. (5) estaban en completo abandono, en un lugar sin aseo que no garantizaba la integridad de estas menores. Las niñas al parecer viven con su madre, Carolina Montero García, pero ella está ausente casi todo el día. Con la llegada del fiscal -ante la ausencia de un adulto que las cuide- las tres menores fueron retiradas de ese lugar.

Después de estar bajo el cuidado del Ministerio Público, al haberse evidenciado que las menores no pueden estar viviendo en ese tipo de condiciones, increíblemente el fiscal de turno -en una disposición criticada- resolvió entregar a las niñas a su madre. Nuevamente regresaron a su casa, pero luego fueron sacadas por el pedido de los vecinos que a diario son testigos de cómo subsisten las hermanitas a pesar de estar con su madre.

por el bienestar de las menores, los vecinos piden la intervención del Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, para que estas niñas sean llevadas a un albergue donde se les pueda educar y brindar un mejor trato del que reciben en su casa. La mayor de las hermanas le contó a los vecinos que es ella la que se encarga de cocinar para las demás menores, ya que su madre no para en su casa y recién en la noche regresa a verlas.

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