El Sindicato Único de Trabajadores de Defensa Pública y Acceso a la Justicia de Ica llevó a cabo una paralización la mañana del viernes para exigir una nivelación salarial que llevan reclamando desde el año 2015. Ante la falta de respuestas concretas, el sindicato ha decidido iniciar una huelga indefinida.
Desigualdad laboral
Carlos Espinoza Arce, dirigente del sindicato, indicó que, a pesar de las conversaciones sostenidas con el ministro de Justicia y las paralizaciones realizadas desde agosto, no se ha logrado avanzar en la aprobación del aumento salarial. Espinoza destacó que desde el 2018 existen contratos con salarios que representan hasta un 40% menos de lo que perciben otros trabajadores con la misma función, generando una profunda desigualdad.
Los empleados también han expresado su sorpresa y descontento por una reciente modificatoria que amplía las jornadas laborales sin consulta previa. Según los trabajadores, esta decisión incrementa sus horas de trabajo sin un ajuste en la remuneración, lo que consideran una medida discriminatoria. Algunos empleados llevan más de 10 años percibiendo el mismo sueldo, lo que ha provocado un creciente descontento dentro del sindicato.
Espinoza Arce refutó las declaraciones del ministro de Justicia, quien asegura que la situación está bajo control. Sin embargo, el dirigente sostuvo que esto no se refleja en la realidad, especialmente tras la reciente inauguración del módulo de flagrancia en Ica, donde solo han movido a defensores públicos que ya laboraban en la sede actual, sin incrementar el personal necesario para cubrir la demanda.
Los trabajadores de defensa pública mantienen la huelga indefinida y exigen una reunión con el Ministerio de Economía para tratar la nivelación salarial pendiente. A pesar de los compromisos anteriores, el sindicato insiste en que no se ha materializado ninguna medida concreta para solucionar sus demandas, lo que los ha llevado a tomar esta acción de protesta.
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