Las intervenciones exitosas se realizaron en el Hospital Belén de Trujillo.
Las intervenciones exitosas se realizaron en el Hospital Belén de Trujillo.

Tras reiniciar las especialidades que atendían antes de la pandemia por la COVID-19, el Hospital Belén de Trujillo reanudó también sus intervenciones quirúrgicas en diversas áreas, por ejemplo, la implantación de marcapasos para salvar la vida de pacientes con cobertura del (SIS).

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Esto es posible gracias de las gestiones realizadas para obtener el financiamiento para la compra de los equipos, viabilizar las atenciones y a la intervención del personal del área de Cardiología del nosocomio.

“Este año, desde fines de abril a la segunda semana de mayo, se atendió seis implantes, de manera exitosa, los últimos fueron el señor Alva y la señora Huamán, que ya están en sus domicilios, y hay dos casos más en preparación para la colocación de sus respectivos marcapasos cardiacos”, dijo la cardióloga Omayra Arangurí Rodríguez.

Un equipo multidisciplinario participa en estas operaciones quirúrgicas para implantar el dispositivo, el que -además de la Dra. Arangurí- integran los cardiólogos Isabel Ruiz Li y Oscar Ramírez Quito. Este último hace la evaluación pre quirúrgica, riesgo anestesiológico y la programación del paciente. A ello se suma una enfermera circulante (del hospital) y el soporte técnico que llega de Lima con el marcapaso adquirido.

“Cuando empecé a laborar el año 2019 en Farmacia había 11 marcapasos en stock, adquiridos en una licitación anterior, y se les comenzó a dar uso de acuerdo a la demanda hasta antes que comience la pandemia en el 2020, completándose su uso en el 2021 en que se colocó el último en octubre”, recuerda la responsable del área de Cardiología.

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Pacientes y atenciones

Este año hubo nueve casos por atender, pero por no disponer de los equipos por algunos inconvenientes, y por la urgencia, se derivó pacientes a hospitales de Chiclayo y Cajamarca. En el Belén, entre abril y mayo se colocaron seis marcapasos y a diciembre se espera superar el promedio anual, que es de 11.

Gracias al SIS los pacientes evitan pagar entre 11 a 12 mil soles, que es lo que se cobra regularmente. Sin embargo, en un establecimiento de salud privado el costo es mayor.

Un dispositivo unicameral cuesta entre 7 a 7,500 soles y si es bicameral de 8 a 8,500 soles, lo que cubre íntegramente el SIS, igual que la estancia hospitalaria, la sala de operaciones donde está el Arco en C, la fluoroscopia, el servicio técnico médico y los tecnólogos que manejan el arco en C.

“El SIS y el área de Logística del Hospital Belén realizan la compra de los equipos y nos llaman para dar conformidad, si se cumplen los requisitos. Al final, los equipos deben llegar con soporte técnico”, agrega Arangurí Rodríguez.

El marcapaso es un pequeño dispositivo que “vigila” y detecta cuando el corazón late irregularmente, enviándole una señal para que lo haga al ritmo correcto. Está diseñado para producir impulsos eléctricos que estimulan al músculo cardíaco en los casos en que falla la estimulación fisiológica o normal.