En la temática de Pérez Alencart, está el hombre y la naturaleza, ondean el sentir y la conservación de la especie humana.
En la temática de Pérez Alencart, está el hombre y la naturaleza, ondean el sentir y la conservación de la especie humana.

Alfredo Pérez Alencart (Puerto Maldonado, Perú, 1962) es un poeta peruano-español, docente de la Universidad de Salamanca. En agosto de 2022 presentó en su libro “Selva que cabes en el tamaño de mi corazón (poesía amazónica reunida)”. Alfredo fue secretario de la Cátedra de Poética Fray Luis de León de la Universidad Pontificia de Salamanca (1992 - 1998) y director, desde 1998, del Encuentro de Poetas Iberoamericano que organiza la Fundación Salamanca. Su poesía parcialmente fue traducida a cincuenta idiomas y mereció el Premio Internacional de Poesía Vicente Gerbasi (Venezuela, 2009), Premio Jorge Guillén de Poesía (España, 2012), Premio Humberto Peregrino (Brasil, 2015), Premio Andrés Quintanilla Buey (España, 2017) y la Medalla Mihai Eminescu (Rumanía, 2017), entre otros.

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LIBROS

En la temática de Pérez Alencart, está el hombre y la naturaleza, ondean el sentir y la conservación de la especie humana. No obstante, su exilio académico no olvidó a la selva, su natura identidad. En su vida intensa ha publicado los poemarios: La voluntad enhechizada (2001), Ofrendas al tercer hijo de Amparo Bidón (2003), Hombres trabajando (2007), Cristo del Alma (2009), Estación de las tormentas (2009). El vivir lejos de Perú motivó al vate a enaltecer la experiencia vital de su procedencia. Entre los elementos poéticos están valores y la búsqueda de justicia. Editó los libros: Savia de las Antípodas (2009), Aquí hago justicia (2010), Margens de um mundo ou Mosaico Lusitano (2011), Prontuario de Infinito (2012), La piedra en la lengua (2013), Los éxodos, los exilios (2015), El pie en el estribo (2016); Ante el mar, callé (2017) y Barro del Paraíso (2919).

OBRA ECOLÓGICA

A la bibliografía anterior debemos incluir la de mayor fuerza ecológica, desde la exaltación del hábitat hasta la actitud conservacionista de la selva sureña, correspondiente a su vigente sentimiento selvático (Pucallpa), el cual consta en Madre Selva (2002), Pájaros bajo la piel del alma (2006), Cartografía de las revelaciones (2011), Memorial de Tierraverde (2014) e incluso en los libros inéditos: Volví y otros poemas inéditos (2007-2022), y Posesión entre luciérnagas (2002), los cuales parcialmente conforman “Selva que cabes en el tamaño de mi corazón (poesía amazónica reunida)”. Estos textos tienen fechas de publicación intercaladas con los otros libros, demostrando variedad y asunto integral. Ecohumanismo.

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ECO LITERATURA

En base a la literatura comparada y la tematología desde las escuelas estructurales (Brémond, Barthes) y considerando la propuesta analítica de Propp (1998), se puede extrapolar los textos literarios, a nuevos significados a lo que Mauro Guimarães (2004) considera que la construcción literaria en toda educación es, antes de todo, educación ambiental. Alfredo Pérez fomenta el cuidado de nuestra aldea global.

SELVA

Pérez Alencart en la “Selva que cabes...” presenta cinco capítulos y una adenda. Se incluyen dos de sus libros de manera completa en los que se distingue el espíritu esencial, autobiográfico, verde aposento en su Manú interior: “matriz del comienzo de mi existencia,/ resurgen los verdes inolvidables/ de las copas pintadas de los árboles/del aire limpio que cubre/días de arco iris y privilegios” (p.59) en (Madre Selva) y sobresale el clamor contra la deforestación, la depredación y la contaminación de las aguas, así como un homenaje a los pueblos indígenas (Memorial de tierra verde).

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VERDE

El poeta inicia su cantata a la naturaleza como cazador de palabras de homenaje en soliloquios ante río Amarumayo. Rememora a don Luis Sanihue que no lo dejaron ser ante el turista y petrolero, no valoraron a nuestro nativo. El poeta aparece épico porque la luz de las luciérnagas es poesía desde su infancia. Descubre que el río Madre de Dios y al “puerto de laberinto” “donde se desborda el oro en el vacío de la nada” (p.45). Es un conservador del paraíso y aguajal. Sin duda que los cielos han ensanchado su corazón y se convierte en “Toro encantado” y “entierra sus patas en el antiguo paraíso” (p.168). Como hombre generoso goza y defiende su terruño. Selva territorio exacto del origen. Huele a Tacacho y chuchuhuasi. Árboles resistentes. Independencia de la selva. Agua para el mundo desde la sierra.

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LA FAMILIA

Sabe que la selva cabe en su corazón y en su familia. Por ello, incide en sus reclamos, defendiendo a la selva de hoy, y del mañana. Así escribe sus mandamientos del trópico. A veces alterna con poema de hasta diez fragmentos enumerados con romanos. Destacan los dípticos a los padres (p.132), al hijo (p.138) a la esposa (p.140). Sus versos tienen vida por las personas e imágenes que dimensionan las reflexiones sobre la amazonia, último pulmón del planeta. Los poemas presentan diferentes registros y tonalidades. Además, termina con la adenda en prosa en la cual posiciona y concluye, ecologista y conservacionista.

EPÍLOGO

Es la ternura selvática en su memoria. La montaña con su esplendor en cada amanecer. El río del pensar y vivir, y la selva de la vida desde la naturaleza. Por lo que, aplicar el uso de conceptos ecológicos a sus obras literarias, va creciendo más allá del simple tópico. De la selva su poesía.

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