Ataque letal: Este homicidio se perpetró el último sábado, minutos antes de las 7:30 de la noche.
Ataque letal: Este homicidio se perpetró el último sábado, minutos antes de las 7:30 de la noche.

Un conductor de colectivo, identificado como Harry Lázaro Loyola, de 33 años, fue asesinado por sicarios cuando se desplazaba por la Panamericana Norte, a la altura del sector Valdemar, en el centro poblado Víctor Raúl, en . El ataque se produjo mientras la víctima conducía un automóvil rojo, con placa T6S-459, que cubría la ruta Víctor Raúl - Virú. Se supo que los sicarios dispararon desde una motocicleta.

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Sin piedad

El atentado, como ya se hizo ‘costumbre’, ocurrió en pleno estado de emergencia, medida impuesta en la provincia de Virú y otras dos localidades de La Libertad debido a la creciente ola de violencia. Los criminales, a bordo de una motocicleta con placa 2914ET, embistieron el vehículo de la víctima antes de abandonarlo en la vía.

Vecinos expresaron su preocupación ante la violencia descontrolada en la zona. “Todos los días se tiene que convivir con la delincuencia. Vemos que, incluso con el estado de emergencia, los delincuentes se burlan de las autoridades”, declaró uno de los residentes.

El motivo. Harry Lázaro Loyola, quien también trabajaba en un lavadero de autos, habría sido víctima de un posible ajuste de cuentas. Las primeras hipótesis manejadas por la Policía apuntan a que el crimen podría estar relacionado con disputas previas que el fallecido habría tenido con otros hombres hace más de una semana en el establecimiento donde trabajaba. Sin embargo, el móvil del crimen aún no ha sido confirmado.

El caso está a cargo del Departamento de Investigación Criminal (Depincri) de Virú, quienes revisan los antecedentes de la víctima. Hasta el momento, se desconoce si Harry Lázaro Loyola tenía denuncias o estuvo involucrado en conflictos delictivos que pudieran haber desencadenado su asesinato.


No ven resultados

La percepción generalizada es que las medidas de seguridad no están logrando frenar los actos delictivos. En efecto, el estado de emergencia, vigente en las provincias de Virú, Trujillo y Pataz, no ha logrado detener la ola de sicariato que azota la región. A pesar de los esfuerzos de las fuerzas del orden, la violencia sigue cobrando víctimas, y la población exige una mayor presencia policial y medidas más contundentes para frenar a los grupos criminales.

Hoy, la Policía, nuevamente, se pronunciará sobre esta crisis que se vive en la región.


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