El último reporte de la Dirección Ejecutiva de Salud Ambiental (Diresa) es una fuerte advertencia para las autoridades de Lambayeque, pues más de 50 mil habitantes están expuestos a la contaminación por el consumo de agua con arsénico.

Dicho grupo incluye a menores de edad y mujeres embarazadas, quienes se encuentran a lo largo de 181 centros poblados del departamento.

La información muestra que Mórrope encabeza la lista de localidades con mayor presencia de metales pesados en el recurso hídrico. Le siguen Mochumí, Manuel Mesones Muro, Pimentel, Lambayeque, Pacora, Íllimo, Túcume, Salas, Cañaris, Pítipo, Pucalá, Monsefú, Reque, Motupe, Olmos, Incahuasi, Ferreñafe y Picsi.

Los metales encontrados son: arsénico, cianuro, cadmio, plomo, mercurio, molibdeno, nitritos, entre otros.

En Mórrope el problema se comprobó hace seis años, y ello motivó la distribución de filtros purificadores en las viviendas, pero los equipos no recibieron mantenimiento.

“Hay preocupación por todas estas zonas, porque son muchas familias que no tienen acceso al sistema de agua potable y se abastecen mediante pozos tubulares”, declaró Rubén Eneque Namuche, coordinador de la estrategia de Metales Pesados de la Gerencia Regional de Salud (Geresa).

Hasta el momento van 500 pacientes atendidos a través de especialidades médicas. Aunque la mayoría no ha desarrollado síntomas de gravedad, es necesario el seguimiento clínico y que la Diresa ejecute nuevas acciones de vigilancia sobre la calidad del agua para identificar otros focos contaminantes.

El Colegio Médico de Lambayeque señaló que el estado deplorable de los servicios básicos de agua y desagüe en distintas partes de la región, el cual no es atendido por la autoridad, suma a la crisis.

Enfatizó que el uso de agua con arsénico para consumo humano constituye un grave problema, debido a sus potenciales efectos perjudiciales para la salud que van desde problemas gastrointestinales hasta daños neurológicos y cáncer, cuando hay exposición prolongada.

El Consejo Regional, encabezado por el galeno Humberto Rosas, exhortó al Ministerio de Salud (Minsa), al Gobierno Regional de Lambayeque, Geresa, Otass y Epsel a brindar una solución integral por el bien de cientos de familias.

El caserío Eureka (Lambayeque) fue evaluado hace poco y la Geresa verificó que 28 personas dieron positivo a arsénico en la sangre por encima del valor permisible. Si esta población no cambia su forma de consumo, acumulará el metal en el organismo y en un futuro tendrá complicaciones a la salud.

A ello hay que agregar que la región no cuenta con un laboratorio acreditado para procesar muestras de agua y de pacientes. Los análisis obtenidos se dieron mediante el apoyo del Instituto Nacional de Salud (INS), que tiene su sede en Lima.

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